Nepal Sep-11 2/2
Domingo 25 Septiembre (Dhulikhel – Namobuddha - Kathmandu)
En este hotel, desde recepción te despiertan cuando amanece para que lo veas (si está despejado) desde los ventanales de la habitación, pero hoy no hay llamada, yo me he despertado y asomado, pero no se ve nada de nada así que de nuevo a la cama hasta las 7:30 que toca levantarse.
Después de desayunar, ponemos rumbo a Namobuddha. Es un pequeño pueblecito pero también el nombre de un monasterio tibetano que se encuentra en lo alto de una colina que se alza detrás del pueblo.
Este monasterio tiene gran importancia en la religión budista, se asienta en uno de los lugares que visitó Buda.
El monasterio es de corriente Budista-Tibetana pero no de la que lidera el Dalai Lama, en éste tienen otro líder al que seguir.
Antiguamente había una serie de pequeños monasterios pero ahora han construido uno enorme, que decepciona un poco si vienes esperando encontrar un monasterio tradicional ya que parece un complejo de vacaciones de los de “Todo Incluido”. Todo es nuevo y parece de cartón piedra, lo bonito son las vistas que tienen y tengo que reconocer que me ha gustado la sala principal de oración por el colorido de su decoración, es una peno no poder hacer fotos dentro.
Hay algunos monjes que han venido a meditar y otros que viven aquí y estaban dando una clase de música. Estos últimos eran muy jóvenes.
Empezamos una ruta desde el monasterio, por suerte hoy no llueve y aunque supongo que habrá barro, al menos no nos calaremos. Empezamos a bajar por la ladera hasta el pueblo de Namobuddha, es muy pequeñito pero destaca una preciosa estupa en medio del pueblo decorada con banderas de oración. Se conoce poco sobre esta estupa, pero cuenta la leyenda que un Buda del pasado se encontró una tigresa a punto de morir de hambre e incapaz de alimentar a sus cachorros. En esta situación el Buda dejó que el animal se lo comiera. Este acto de compasión hizo que llegara a los reinos más altos de la existencia.
Seguimos nuestro camino entre arrozales y cruzamos algunos pequeños pueblos. Todo está muy verde y la gente está dedicada a sus labores diarias.
En una orilla del camino nos encontramos con unas matas de Marihuana, ahí a la vista de todos. También en algún momento algunos locales nos ofrecen que si queremos comprar. Esto es una señal que en Nepal produce y que por algo venían los hippies por aquí :).
Pasamos por un pueblo con cole y hay un montón de niños jugando a algo parecido al futbol pero con un campo muy diferente. Las porterías son unos semicírculos súper pequeños y las rallas del campo son todas paralelas. Pero eso si, el partido debía tener mucho interés por la cantidad de espectadores que había :)
Aunque no todos estaban viéndolo, había alguno niños que seguían en clase estudiando, Estarían castigados???? :)
El objetivo de nuestra caminata es Panauti que nos recibe con una zona de templos en las orillas del agua. Lo mejor es que yo no me esperaba llegar a un sitio así y ha sido una alegría.
Panauti se asienta en la sagrada confluencia del Roshi Khola y el Pungamati Kola. Se cree que un tercer río invisible, llamado Padmabati, se uno a los dos anteriores en este mismo punto. Los puntos de unión de ríos se consideran lugares sagrados en el hinduismo y es en ellos donde se construyen los templos. En esta zona, los templos resistieron al terremoto de 1934 pero algunos sufrieron daños en el de 1988.
Hoy Panauti ha perdido el esplendor que antiguamente tenía por ser un importante centro de comercio, se ha quedado un poco anclada en el pasado, esto aumenta su encanto como lugar a visitar.
El Templo de Indreshwar Mahadev es el más importante, es encuentra en una explanada en medio del istmo entre los dos ríos. Está coronado con un tejado tipo pagoda de tres pisos y constituye una impresionante muestra de la arquitectura newar. El templo original data de 1294, pero sufrió varias reconstrucciones hasta que en el S.XV alcanzó la forma con el que lo encontramos ahora.
Al sur de este templo se encuentra el de Unamanta Bhaurab, que se caracteriza por los tres rostros de dios demonio que tiene mirando por las ventanas de la planta inferior.
En otra de las esquinas hay un pequeño templo de Siva con doble tejado así como un segundo santuario, que contiene una enorme imagen negra de Visnú como Narayan.
Algunos detalles de estos espléndidos templos:
Toca poner rumbo a Kathmandu, eso implica respirar hondo, soltar aire y relajarse ya que el Súper Atasco nos espera, ha empezado a llover lo que va a agravar mucho más el caos circulatorio crónico que hay en Kathmandu. La verdad es que viendo este horror un atasco en la M-30 en hora punta es una carrera de formula uno :)
Tras varias horas llagamos al hotel, está en la zona de Thamel y se ve mucho ambientillo por la zona.
Al llegar al hotel nos encontramos con la horrible noticia que ha habido un accidente aéreo, un avión ha caído en las afueras de Kathmandu y han muerto todos los pasajeros y los tripulantes. Pero lo que más impresiona es que ha sido el avión y la tripulación con la que hicimos nuestro vuelo interno Lumbini-Pokhara. Noticias así te dejan un poco helado, pero es mejor no pensarlo.
Algunas notas sobre Kathmandu:
Es la capital y la ciudad más grande de Nepal, con una población de 1.442.271 habitantes (en 2006). Está situada en el valle del mismo nombre en el Nepal central, en las cercanías del río Vishnumati, a una altura de 1.317m. La ciudad antigua se caracteriza por la gran cantidad de templos y palacios budistas e hinduistas, la mayoría de ellos del siglo XVII. Muchos de estos monumentos han sido por desgracia dañados por terremotos y por la polución. En el valle de Kathmandu se encuentran siete sitios clasificados por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. A raíz del movimiento hippie, desde los años sesenta Kathmandu se convirtió en un sitio muy visitado por turistas
Historia.- Las exploraciones arqueológicas indican que Kathmandu y otras dos aldeas hermanas en el mismo valle son los pueblos más antiguos de la zona, que datan de la época entre el 167 a. C. y el año 1 d. C. Las excavaciones que se han llevado a cabo en Hadigaon y Lubhu, en la parte sur del valle han descubierto paredes de ladrillos y herramientas del Neolítico.
Los Kirats fueron los primeros gobernantes conocidos del valle y los restos de un palacio construido por ellos se encuentran en Patan, cerca de Hiranyavarna Mahavihara. La dinastía Licchavi, cuyas inscripciones datan del año 464 d. C., fueron los siguientes gobernantes. La dinastía Malla, constituida por regentes Newar, gobernaron desde el siglo XII hasta el XVII, cuando el fundador de la dinastía Shah, Prithvi Narayan Shah, conquistó el valle y creó el Nepal que conocemos hoy en día. La mayoría de la arquitectura existente en Nepal es de los períodos Malla y Newar.
La ciudad de Kathmandu recibe su nombre de una estructura en la plaza de Durbar llamada Kaasthamandap. Este templo fue construido en el año 159 d. C. por el rey Laksmi Narsingh Malla. Está construido enteramente con madera sin ningún clavo de hierro o soporte de ningún tipo. Una leyenda indica que la madera necesaria fue obtenida de un único árbol traído de India.
Dejar maletas, paseíto para ver la zona, cenar algo y a dormir.
Información del Hotel:
Kathmandu Guest House
P.O Box 21218 Thamel Kathmandu
WEB: www.ktmgh.com
e-Mail: ingo@ktmgh.com
Valoración – Muy Buena
- Esta Guest House fue la primera que se abrió en Kathmandu en la zona de Thamel (la zona turística). Por lo que tiene mucha historia, hay estrellas en el suelo, como si de un paseo de la fama se tratara con los ilustres que han pasado. Había nombre como: Los Beatles, Richard Guere, Shakira, Riki Martin….
- Muy buena ubicación.
- El desayuno es en un patio muy agradable pero hay muy poco espacio y si llueve solo hay unas pocas mesas a cubierto, creo que deberían mejorar este punto así como la organización de buffet que era un horror.
- Wi-Fi en el Lobby, en algunos momentos estaba abierta pero otros era de pago.
Lunes 26 Septiembre (Kathmandu)
Arriba a las 8:30, el día está horrible se ha pasado toda la noche lloviendo fuerte y continúa. El desayuno en el recinto que tiene habilitado es un horror pues te mojas.
Salimos hacia Swayambhunath, también conocido como el templo de los monos por la cantidad de ellos que hay por la zona. Eso sí, con chubasquero, paraguas y todo lo necesario para protegerse de la lluvia.
El templo budista de Swayambhunath se encuentra sobre una de las colinas que rodean Kathmandu, parece que la vigila desde lo alto. Para llegar a él hay dos caminos, seleccionamos la escalinata oriental para subir, se trata de una impresionante escalinata construida par el rey Pratap Malla en el S.XVII y es la que usan los peregrinos.
En esta escalera habitualmente hay miles de monos pero hoy con la que está cayendo, en vez de escalera es una impresionante cascada. El agua baja de un escalón a otro en tropel, pero aún así es divertido subirla simulando que somos peregrinos con la ilusión de alcanzar la estupa y rodearla en el sentido de la agujas del reloj.
Una vez arriba, nos encontramos con el Gran Rayo. Es un enorme Dorje “Rayo Celestial” chapado en latón. Este es uno de los símbolos centrales del budismo tibetano. Simboliza el poder de la iluminación, que destruye la ignorancia y a su vez es indestructible. En los rituales, el rayo simboliza lo masculino, para simbolizar lo femenino están la campana ceremonial, que tampoco falta en estos templos.
En el pedestal de este Dorje, hay figuras que representan los animales del calendario tibetano.
Detrás del gran rayo nos encontramos la Estupa de Swayambhunat, considerada una de las mayores joyas arquitectónicas del valle. Se trata de un monumento perfectamente proporcionado con una preciosa aguja dorada sobre su cúpula encalada que representa la tierra. Desde la aguja, cuatro rostros de Buda observan el valle en la dirección de los cuatro puntos cardinales. El garabato en forma de nariz situado debajo de los penetrantes ojos es el número nepalí “ek” (uno) y representa la unidad. Por encima hay un tercer ojo que representa el conocimiento.
La base está bordeada por ruedas de oración repujadas con el mantra sagrado “om mani padme hum” (Alabada sea la joya del loto). Los peregrinos deben rodear la estupa siguiendo la dirección de las agujas del reloj e ir haciendo girar estas ruedas de oración mientras van recitando sus mantras.
Rodeando la estupa, encontramos un verdadero jardín de monumentos religiosos.
En uno de los lados de la explanada hay una especie de monasterio, en una de las salas tienen una clase de música, están con todo tipo de instrumentos incluidas las típicas trompetas tibetanas. En otra de las salas hay miles de velas de mantequilla que encienden los devotos, la imagen es preciosa.
Los monos campan a sus anchas por esta zona, están encaramados en cualquier sitio, hay uno muy gracioso que consigue meter la mano en uno de los altares de la estupa y sacar un billete que aún devoto ha depositado y sale corriendo con su tesoro y cuando para intenta comérselo.
Bajamos por el otro camino, menos escarpado y menos interesante que lleva al aparcamiento. Antes de llegar hay otra estupa más pequeña que da la sensación de ser la maqueta de la anterior, aunque realmente no lo sea.
Bajo la lluvia nos acercamos a la Durban Tole de Kathmandu, cruzamos uno de los puentes y el río que pasa por debajo viene con una fuerza increíble, en algo se debe notar tanta lluvia. Nos dicen que hace más de 25 años que no llueve tanto en un solo día.
Después de esquivar varios coches, bicicletas, motos y profundos charcos llegamos a la plaza, se supone que es más impresiónate que la de Bakthapur, pero debe ser la lluvia ya que a mi no me gusta mucho, la veo como un poco dejada , pero ya digo, será la lluvia y este día que no deja disfrutar de las visitas. Esta plaza, como el resto de las Durban Tole de las Ciudades-Estado del Valle están consideradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Era en esta plaza donde se coronaba y se legitimaba a los reyes y desde aquí reinaban. No es de extrañar por tanto que “durbar" signifique palacio.
La Durbar Tole es el centro de la Kathmandu antigua, realmente está compuesta por tres plazas semiconectadas: Al sur la plaza Basantapur, que eran unas antiguas cuadras para los elefantes reales, al oeste es la parte principal, donde se encuentran casi todos los templos y al noroeste encontramos la entrada a Hanuman Dhoka y a varios templos.
En la plaza está el Templo Kasthamandap que es el que ha dado el nombre de Kathmandu a esta ciudad. Su historia real se desconoce pero cuenta la leyenda que este edificio de tres niveles de tejado se construyó en el S.XIII con la madera de una sola dhorea (árbol que solamente se encuentra en el norte de la India).
Inicialmente haría de centro comunitario donde se hospedaban los devotos que venía de peregrinación pero después se convirtió en un templo dedicado a Gorakhnath que era un asceta del S.XIII que se unió a la familia real. Sus discípulos permanecieron aquí hasta 1960.
En sus cuatro esquinas hay una imagen de Ganesha, la situada a la entrada de la plaza es la más popular. Todos los martes se forman verdaderas colas de devotos para hacer los rituales a este dios.
Hoy en día este espacio es mult-uso, se pueden encontrar vendedores de verduras, gente sentada y a algún Brahman haciendo ritos.
Hay un Brahman con dos jóvenes haciendo un rito funerario (supongo que por su padre) pero dado que no tienen el pelo rapado se trata de uno de los que se hacen pasado el tiempo de luto tras la muerte de la persona.
Salimos a la plaza, paraguas en mano y damos una vuelta. La concentración de templos es increíble, te podrías pasar horas recorriendo todos los rincones, pero hoy no es el día.
Entramos en la Kumari Bahal, que traducido es “casa de la diosa viviente”. Es un bonito edificio de ladrillo con madera ricamente trabajada. En el interior tiene un patio “kumari chowk” o patio de la kumari, al que dan las ventanas del piso superior por donde suele asomarse la Kumari para que la vean los peregrinos y los turistas que nos acercamos a la casa. Está terminantemente prohibido hacer fotos a la kumari, en el patio hay personas que se ocupan de que esto no ocurra y no tienen cara de buenos amigos la verdad.
En Nepal, a parte de los miles de dioses que tienen, tienen también Dioses vivientes y suelen ser niñas a las que llaman “KUMARI DEVI”. Esta tradición viene del S.XVIII bajo el reinado de Jaya Prakash Malla, el último rey Malla de Karthmandu. Su origen está un poco diluido, hay varias leyendas:
1.- Un rey Malla que era pedófilo mantuvo relaciones con una niña a las puertas de su pubertad y la niña murió, arrepentido y a modo de penitencia inauguró la práctica de venerar a una niña diosa.
2.- Un rey malla jugaba a los dados con la diosa Teleju (la diosa de los reyes Mallas y protectora del valle) y él era el único que podía verla. Tuvieron una disputa y la diosa desapareció y el rey ya no podía verla. Tras los ruegos del rey la diosa le dijo que volvería a estar visible pero bajo la apariencia de una niña del valle.
Sea cual sea el origen, la realidad es que esta tradición se ha asentado y son muchos los que veneran a las Kumari Devi que hay en el valle, aunque la que ha cobrado importancia, incluso política es la de Kathmandu.
Las Kumari se selecciones dentro de las niñas de la casta de los plateros y orfebres newares y suelen tener unos 4 años. Se buscan las candidatas por el valle, a parte de su origen deben cumplir estrictamente 32 rasgos físicos que van desde el color de ojos, la forma de los dientes, la voz… y claro está es súper importante cual sea su horóscopo.
A las preseleccionadas se les hace pasar una serie de pruebas, la más increíble es una en la que las encierran en una habitación sin luz adornada con 108 cabeza de búfalo en la que entran una serie de hombres con máscaras horribles haciendo ruidos aterradores, la verdadera Kumari será aquella que no se asuste y no llore ya que es la reencarnación de Teleju y esta diosa no se puede asustar de estas cosas.
La última prueba es similar a la que se usa para determinar el nuevo Dalai Lama, debe reconocer la ropa y objetos personales que pertenecieron a la anterior Kumari.
La niña seleccionada se la traslada a la Kumari Bahal y no sale de ella, salvo en las ceremonias. La más espectacular es la de Indra Jarta en la que sale la carroza ceremonial a recorrer las calles de Kathmandu. Su familia puede venir de visita pero no vive con la niña, esta se queda con los profesores y ayudantes.
Cando la Kumari llega a la pubertad o tiene algún accidente donde pierda gran cantidad de sangre, deja de ser Kumari y empieza el ritual de encontrar a sus sustituta. A la saliente se le asigna una suculenta dote para que siga viviendo ya que no está bien visto casarse con una kumari algunos dicen que es de mal fario y que el marido suele morir pronto, pero la realidad es que no debe ser cómodo casarse con una persona que ha sido tratada como diosa durante la primera parte de su vida, muchas de ellas se van al extranjero a empezar una nueva vida.
Como en una librería/tienda de Thamel, es un lugar muy agradable, es como un comedor lleno de estanterías con libros. Hay mesas y también almohadas para estar sentada en el suelo y hay gente tranquilamente leyendo. Muy agradable y recomendable.
Paso tarde paseando por Thamel, haciendo alguna compra y preparando la maleta.
Por la noche cenamos en el Rum Doodle, un local mítico donde se suele ir a cenar tras volver de las expediciones del Himalaya. Por las paredes y colgando del techo hay cartones en forma de huella de BigFoot donde la gente anota mensajes, pone dibujos… te podrías pasar varios día para leerlos todos.
Martes 27 Septiembre (Kathmandu - Delhi)
Arriba a las 8:00, hoy amanece soleado GENIAL!!!
Tras desayunar, nos vamos ya con las maletas pues vamos a hacer alguna visita paro por la parte del aeropuerto así que para no tener que deshacer el camino nos vamos con todo puesto J
Primera parada: Pashupatinath. Es el principal templo hindú de Nepal, se alza a las orillas del río sagrado Bagmati. Constituye el centro neurálgico del pode espiritual hindú. Está dedicado a Siva pero no en su forma destructora sino como Pashupati “el señor de las bestias”. El templo solamente está abierto para los hindúes, se construyó en 1696 pero ya desde antiguo éste lugar había sido un enclave importante para el culto hindú.
A pesar de la basura y la contaminación de sus aguas, el río Bagmati es un río sagrado para los hindúes nepalíes es lo mismo que el Ganges por su paso por Benarés para los indios. En esta zona hay varios Ghats (escaleras que van hasta el río).
Entramos a la zona por la parte opuesta al templo, al llegar a las orillas del río la atmósfera religiosa se empieza a palpar hay mucha gente sentada enfrascadas en sus rituales de la mano de los muchos Brahmanes que hay por la zona.
La imagen que ofrece la otra orilla del río es impresionante, es la destinada para las cremaciones. Podemos ver una serie de plataformas cubiertas por tejados de uralita granates sobre las que arden piras funerarias bajo la atenta mirada de los familiares que están sentados en un bando en la parte de atrás.
Hay personas que se encargan de avivar las llaman poniendo paja sobre la pira
Al final de esta zona, un puente sobre el río la separa de la otra parte de la ribera, en el lado del río más cercano al templo, se encuentra la zona de cremaciones de la realeza. Es aquí donde en 2001 se relazaron las ceremonias de cremación del los 10 miembros de la familia real asesinada por el príncipe heredero.
Dado que ya no hay realeza, esta zona se ha quedado para celebrar las cremaciones de las personas importantes y las familias ricas de Nepal.
Cuando llegamos están preparando en esta zona una pira funeraria, nos dicen que va a ser para el piloto del avión accidentado de BuddhaAir. Empiezan apilando ordenadamente la madera sobre una cama de hierba, después colocan guirnaldas de flores color azafrán y amarillo y finalmente colocan una especie de palio forrado de tela color azafrán y lo adornan con flores y hojas.
Ya está preparado para que llegue el cuerpo, para su trasponte, han forrado con tela blanca una estructura de madera para poder acercarlo a la pira.
Mientras construyen la pira, al lado, llegan otros familiares con un cadáver. Es el de una señora mayor. Viene cubierto con una tela amarillo con estampados en color azafrán en los que se aprecia el signo de “OM” y la cara tapada por un paño blanco. Al llegar a la altura del agua, le quitan el paño de la cara y comienzan sus rituales de purificación en las aguas del Bagmati y lo dejan sobre una piedra a modo de tobogán con los pies sumergidos. Se queda así hasta que construyan la pira y empiece la cremación.
A parte de las cremaciones, hay otras personas con rituales también en este margen del río.
En el otro margen del río, unos impresionantes Ghats que están repletos de gente con sus rituales.
Por la parte de arriba, se han construido terrazas de piedra con jardines en los que se encuentran diseminados docenas de pequeños santuarios de Siva. Estos templos son el refugio de los sadhus errantes deambulan por la zona. Los "sadhus" son los santones que van originalmente maquillados, no les falta detalle.
En esta zona puedes pasarte horas, en cada dirección hay algo interesante que ver y observar. Solamente sentarte y ver a la gente que pasa, fijarte en los ritos que practica y disfrutar del momento merece la pena.
Pasamos por un pueblo con cole y hay un montón de niños jugando a algo parecido al futbol pero con un campo muy diferente. Las porterías son unos semicírculos súper pequeños y las rallas del campo son todas paralelas. Pero eso si, el partido debía tener mucho interés por la cantidad de espectadores que había :)
Aunque no todos estaban viéndolo, había alguno niños que seguían en clase estudiando, Estarían castigados???? :)
El objetivo de nuestra caminata es Panauti que nos recibe con una zona de templos en las orillas del agua. Lo mejor es que yo no me esperaba llegar a un sitio así y ha sido una alegría.
Panauti se asienta en la sagrada confluencia del Roshi Khola y el Pungamati Kola. Se cree que un tercer río invisible, llamado Padmabati, se uno a los dos anteriores en este mismo punto. Los puntos de unión de ríos se consideran lugares sagrados en el hinduismo y es en ellos donde se construyen los templos. En esta zona, los templos resistieron al terremoto de 1934 pero algunos sufrieron daños en el de 1988.
Hoy Panauti ha perdido el esplendor que antiguamente tenía por ser un importante centro de comercio, se ha quedado un poco anclada en el pasado, esto aumenta su encanto como lugar a visitar.
El Templo de Indreshwar Mahadev es el más importante, es encuentra en una explanada en medio del istmo entre los dos ríos. Está coronado con un tejado tipo pagoda de tres pisos y constituye una impresionante muestra de la arquitectura newar. El templo original data de 1294, pero sufrió varias reconstrucciones hasta que en el S.XV alcanzó la forma con el que lo encontramos ahora.
Al sur de este templo se encuentra el de Unamanta Bhaurab, que se caracteriza por los tres rostros de dios demonio que tiene mirando por las ventanas de la planta inferior.
En otra de las esquinas hay un pequeño templo de Siva con doble tejado así como un segundo santuario, que contiene una enorme imagen negra de Visnú como Narayan.
Algunos detalles de estos espléndidos templos:
Toca poner rumbo a Kathmandu, eso implica respirar hondo, soltar aire y relajarse ya que el Súper Atasco nos espera, ha empezado a llover lo que va a agravar mucho más el caos circulatorio crónico que hay en Kathmandu. La verdad es que viendo este horror un atasco en la M-30 en hora punta es una carrera de formula uno :)
Tras varias horas llagamos al hotel, está en la zona de Thamel y se ve mucho ambientillo por la zona.
Al llegar al hotel nos encontramos con la horrible noticia que ha habido un accidente aéreo, un avión ha caído en las afueras de Kathmandu y han muerto todos los pasajeros y los tripulantes. Pero lo que más impresiona es que ha sido el avión y la tripulación con la que hicimos nuestro vuelo interno Lumbini-Pokhara. Noticias así te dejan un poco helado, pero es mejor no pensarlo.
Algunas notas sobre Kathmandu:
Es la capital y la ciudad más grande de Nepal, con una población de 1.442.271 habitantes (en 2006). Está situada en el valle del mismo nombre en el Nepal central, en las cercanías del río Vishnumati, a una altura de 1.317m. La ciudad antigua se caracteriza por la gran cantidad de templos y palacios budistas e hinduistas, la mayoría de ellos del siglo XVII. Muchos de estos monumentos han sido por desgracia dañados por terremotos y por la polución. En el valle de Kathmandu se encuentran siete sitios clasificados por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. A raíz del movimiento hippie, desde los años sesenta Kathmandu se convirtió en un sitio muy visitado por turistas
Historia.- Las exploraciones arqueológicas indican que Kathmandu y otras dos aldeas hermanas en el mismo valle son los pueblos más antiguos de la zona, que datan de la época entre el 167 a. C. y el año 1 d. C. Las excavaciones que se han llevado a cabo en Hadigaon y Lubhu, en la parte sur del valle han descubierto paredes de ladrillos y herramientas del Neolítico.
Los Kirats fueron los primeros gobernantes conocidos del valle y los restos de un palacio construido por ellos se encuentran en Patan, cerca de Hiranyavarna Mahavihara. La dinastía Licchavi, cuyas inscripciones datan del año 464 d. C., fueron los siguientes gobernantes. La dinastía Malla, constituida por regentes Newar, gobernaron desde el siglo XII hasta el XVII, cuando el fundador de la dinastía Shah, Prithvi Narayan Shah, conquistó el valle y creó el Nepal que conocemos hoy en día. La mayoría de la arquitectura existente en Nepal es de los períodos Malla y Newar.
La ciudad de Kathmandu recibe su nombre de una estructura en la plaza de Durbar llamada Kaasthamandap. Este templo fue construido en el año 159 d. C. por el rey Laksmi Narsingh Malla. Está construido enteramente con madera sin ningún clavo de hierro o soporte de ningún tipo. Una leyenda indica que la madera necesaria fue obtenida de un único árbol traído de India.
Dejar maletas, paseíto para ver la zona, cenar algo y a dormir.
Información del Hotel:
Kathmandu Guest House
P.O Box 21218 Thamel Kathmandu
WEB: www.ktmgh.com
e-Mail: ingo@ktmgh.com
Valoración – Muy Buena
- Esta Guest House fue la primera que se abrió en Kathmandu en la zona de Thamel (la zona turística). Por lo que tiene mucha historia, hay estrellas en el suelo, como si de un paseo de la fama se tratara con los ilustres que han pasado. Había nombre como: Los Beatles, Richard Guere, Shakira, Riki Martin….
- Muy buena ubicación.
- El desayuno es en un patio muy agradable pero hay muy poco espacio y si llueve solo hay unas pocas mesas a cubierto, creo que deberían mejorar este punto así como la organización de buffet que era un horror.
- Wi-Fi en el Lobby, en algunos momentos estaba abierta pero otros era de pago.
Lunes 26 Septiembre (Kathmandu)
Arriba a las 8:30, el día está horrible se ha pasado toda la noche lloviendo fuerte y continúa. El desayuno en el recinto que tiene habilitado es un horror pues te mojas.
Salimos hacia Swayambhunath, también conocido como el templo de los monos por la cantidad de ellos que hay por la zona. Eso sí, con chubasquero, paraguas y todo lo necesario para protegerse de la lluvia.
El templo budista de Swayambhunath se encuentra sobre una de las colinas que rodean Kathmandu, parece que la vigila desde lo alto. Para llegar a él hay dos caminos, seleccionamos la escalinata oriental para subir, se trata de una impresionante escalinata construida par el rey Pratap Malla en el S.XVII y es la que usan los peregrinos.
En esta escalera habitualmente hay miles de monos pero hoy con la que está cayendo, en vez de escalera es una impresionante cascada. El agua baja de un escalón a otro en tropel, pero aún así es divertido subirla simulando que somos peregrinos con la ilusión de alcanzar la estupa y rodearla en el sentido de la agujas del reloj.
Una vez arriba, nos encontramos con el Gran Rayo. Es un enorme Dorje “Rayo Celestial” chapado en latón. Este es uno de los símbolos centrales del budismo tibetano. Simboliza el poder de la iluminación, que destruye la ignorancia y a su vez es indestructible. En los rituales, el rayo simboliza lo masculino, para simbolizar lo femenino están la campana ceremonial, que tampoco falta en estos templos.
En el pedestal de este Dorje, hay figuras que representan los animales del calendario tibetano.
Detrás del gran rayo nos encontramos la Estupa de Swayambhunat, considerada una de las mayores joyas arquitectónicas del valle. Se trata de un monumento perfectamente proporcionado con una preciosa aguja dorada sobre su cúpula encalada que representa la tierra. Desde la aguja, cuatro rostros de Buda observan el valle en la dirección de los cuatro puntos cardinales. El garabato en forma de nariz situado debajo de los penetrantes ojos es el número nepalí “ek” (uno) y representa la unidad. Por encima hay un tercer ojo que representa el conocimiento.
La base está bordeada por ruedas de oración repujadas con el mantra sagrado “om mani padme hum” (Alabada sea la joya del loto). Los peregrinos deben rodear la estupa siguiendo la dirección de las agujas del reloj e ir haciendo girar estas ruedas de oración mientras van recitando sus mantras.
Rodeando la estupa, encontramos un verdadero jardín de monumentos religiosos.
En uno de los lados de la explanada hay una especie de monasterio, en una de las salas tienen una clase de música, están con todo tipo de instrumentos incluidas las típicas trompetas tibetanas. En otra de las salas hay miles de velas de mantequilla que encienden los devotos, la imagen es preciosa.
Los monos campan a sus anchas por esta zona, están encaramados en cualquier sitio, hay uno muy gracioso que consigue meter la mano en uno de los altares de la estupa y sacar un billete que aún devoto ha depositado y sale corriendo con su tesoro y cuando para intenta comérselo.
Bajamos por el otro camino, menos escarpado y menos interesante que lleva al aparcamiento. Antes de llegar hay otra estupa más pequeña que da la sensación de ser la maqueta de la anterior, aunque realmente no lo sea.
Bajo la lluvia nos acercamos a la Durban Tole de Kathmandu, cruzamos uno de los puentes y el río que pasa por debajo viene con una fuerza increíble, en algo se debe notar tanta lluvia. Nos dicen que hace más de 25 años que no llueve tanto en un solo día.
Después de esquivar varios coches, bicicletas, motos y profundos charcos llegamos a la plaza, se supone que es más impresiónate que la de Bakthapur, pero debe ser la lluvia ya que a mi no me gusta mucho, la veo como un poco dejada , pero ya digo, será la lluvia y este día que no deja disfrutar de las visitas. Esta plaza, como el resto de las Durban Tole de las Ciudades-Estado del Valle están consideradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Era en esta plaza donde se coronaba y se legitimaba a los reyes y desde aquí reinaban. No es de extrañar por tanto que “durbar" signifique palacio.
La Durbar Tole es el centro de la Kathmandu antigua, realmente está compuesta por tres plazas semiconectadas: Al sur la plaza Basantapur, que eran unas antiguas cuadras para los elefantes reales, al oeste es la parte principal, donde se encuentran casi todos los templos y al noroeste encontramos la entrada a Hanuman Dhoka y a varios templos.
En la plaza está el Templo Kasthamandap que es el que ha dado el nombre de Kathmandu a esta ciudad. Su historia real se desconoce pero cuenta la leyenda que este edificio de tres niveles de tejado se construyó en el S.XIII con la madera de una sola dhorea (árbol que solamente se encuentra en el norte de la India).
Inicialmente haría de centro comunitario donde se hospedaban los devotos que venía de peregrinación pero después se convirtió en un templo dedicado a Gorakhnath que era un asceta del S.XIII que se unió a la familia real. Sus discípulos permanecieron aquí hasta 1960.
En sus cuatro esquinas hay una imagen de Ganesha, la situada a la entrada de la plaza es la más popular. Todos los martes se forman verdaderas colas de devotos para hacer los rituales a este dios.
Hoy en día este espacio es mult-uso, se pueden encontrar vendedores de verduras, gente sentada y a algún Brahman haciendo ritos.
Hay un Brahman con dos jóvenes haciendo un rito funerario (supongo que por su padre) pero dado que no tienen el pelo rapado se trata de uno de los que se hacen pasado el tiempo de luto tras la muerte de la persona.
Salimos a la plaza, paraguas en mano y damos una vuelta. La concentración de templos es increíble, te podrías pasar horas recorriendo todos los rincones, pero hoy no es el día.
Entramos en la Kumari Bahal, que traducido es “casa de la diosa viviente”. Es un bonito edificio de ladrillo con madera ricamente trabajada. En el interior tiene un patio “kumari chowk” o patio de la kumari, al que dan las ventanas del piso superior por donde suele asomarse la Kumari para que la vean los peregrinos y los turistas que nos acercamos a la casa. Está terminantemente prohibido hacer fotos a la kumari, en el patio hay personas que se ocupan de que esto no ocurra y no tienen cara de buenos amigos la verdad.
En Nepal, a parte de los miles de dioses que tienen, tienen también Dioses vivientes y suelen ser niñas a las que llaman “KUMARI DEVI”. Esta tradición viene del S.XVIII bajo el reinado de Jaya Prakash Malla, el último rey Malla de Karthmandu. Su origen está un poco diluido, hay varias leyendas:
1.- Un rey Malla que era pedófilo mantuvo relaciones con una niña a las puertas de su pubertad y la niña murió, arrepentido y a modo de penitencia inauguró la práctica de venerar a una niña diosa.
2.- Un rey malla jugaba a los dados con la diosa Teleju (la diosa de los reyes Mallas y protectora del valle) y él era el único que podía verla. Tuvieron una disputa y la diosa desapareció y el rey ya no podía verla. Tras los ruegos del rey la diosa le dijo que volvería a estar visible pero bajo la apariencia de una niña del valle.
Sea cual sea el origen, la realidad es que esta tradición se ha asentado y son muchos los que veneran a las Kumari Devi que hay en el valle, aunque la que ha cobrado importancia, incluso política es la de Kathmandu.
Las Kumari se selecciones dentro de las niñas de la casta de los plateros y orfebres newares y suelen tener unos 4 años. Se buscan las candidatas por el valle, a parte de su origen deben cumplir estrictamente 32 rasgos físicos que van desde el color de ojos, la forma de los dientes, la voz… y claro está es súper importante cual sea su horóscopo.
A las preseleccionadas se les hace pasar una serie de pruebas, la más increíble es una en la que las encierran en una habitación sin luz adornada con 108 cabeza de búfalo en la que entran una serie de hombres con máscaras horribles haciendo ruidos aterradores, la verdadera Kumari será aquella que no se asuste y no llore ya que es la reencarnación de Teleju y esta diosa no se puede asustar de estas cosas.
La última prueba es similar a la que se usa para determinar el nuevo Dalai Lama, debe reconocer la ropa y objetos personales que pertenecieron a la anterior Kumari.
La niña seleccionada se la traslada a la Kumari Bahal y no sale de ella, salvo en las ceremonias. La más espectacular es la de Indra Jarta en la que sale la carroza ceremonial a recorrer las calles de Kathmandu. Su familia puede venir de visita pero no vive con la niña, esta se queda con los profesores y ayudantes.
Cando la Kumari llega a la pubertad o tiene algún accidente donde pierda gran cantidad de sangre, deja de ser Kumari y empieza el ritual de encontrar a sus sustituta. A la saliente se le asigna una suculenta dote para que siga viviendo ya que no está bien visto casarse con una kumari algunos dicen que es de mal fario y que el marido suele morir pronto, pero la realidad es que no debe ser cómodo casarse con una persona que ha sido tratada como diosa durante la primera parte de su vida, muchas de ellas se van al extranjero a empezar una nueva vida.
Como en una librería/tienda de Thamel, es un lugar muy agradable, es como un comedor lleno de estanterías con libros. Hay mesas y también almohadas para estar sentada en el suelo y hay gente tranquilamente leyendo. Muy agradable y recomendable.
Paso tarde paseando por Thamel, haciendo alguna compra y preparando la maleta.
Por la noche cenamos en el Rum Doodle, un local mítico donde se suele ir a cenar tras volver de las expediciones del Himalaya. Por las paredes y colgando del techo hay cartones en forma de huella de BigFoot donde la gente anota mensajes, pone dibujos… te podrías pasar varios día para leerlos todos.
Martes 27 Septiembre (Kathmandu - Delhi)
Arriba a las 8:00, hoy amanece soleado GENIAL!!!
Tras desayunar, nos vamos ya con las maletas pues vamos a hacer alguna visita paro por la parte del aeropuerto así que para no tener que deshacer el camino nos vamos con todo puesto J
Primera parada: Pashupatinath. Es el principal templo hindú de Nepal, se alza a las orillas del río sagrado Bagmati. Constituye el centro neurálgico del pode espiritual hindú. Está dedicado a Siva pero no en su forma destructora sino como Pashupati “el señor de las bestias”. El templo solamente está abierto para los hindúes, se construyó en 1696 pero ya desde antiguo éste lugar había sido un enclave importante para el culto hindú.
A pesar de la basura y la contaminación de sus aguas, el río Bagmati es un río sagrado para los hindúes nepalíes es lo mismo que el Ganges por su paso por Benarés para los indios. En esta zona hay varios Ghats (escaleras que van hasta el río).
Entramos a la zona por la parte opuesta al templo, al llegar a las orillas del río la atmósfera religiosa se empieza a palpar hay mucha gente sentada enfrascadas en sus rituales de la mano de los muchos Brahmanes que hay por la zona.
La imagen que ofrece la otra orilla del río es impresionante, es la destinada para las cremaciones. Podemos ver una serie de plataformas cubiertas por tejados de uralita granates sobre las que arden piras funerarias bajo la atenta mirada de los familiares que están sentados en un bando en la parte de atrás.
Hay personas que se encargan de avivar las llaman poniendo paja sobre la pira
Al final de esta zona, un puente sobre el río la separa de la otra parte de la ribera, en el lado del río más cercano al templo, se encuentra la zona de cremaciones de la realeza. Es aquí donde en 2001 se relazaron las ceremonias de cremación del los 10 miembros de la familia real asesinada por el príncipe heredero.
Dado que ya no hay realeza, esta zona se ha quedado para celebrar las cremaciones de las personas importantes y las familias ricas de Nepal.
Cuando llegamos están preparando en esta zona una pira funeraria, nos dicen que va a ser para el piloto del avión accidentado de BuddhaAir. Empiezan apilando ordenadamente la madera sobre una cama de hierba, después colocan guirnaldas de flores color azafrán y amarillo y finalmente colocan una especie de palio forrado de tela color azafrán y lo adornan con flores y hojas.
Ya está preparado para que llegue el cuerpo, para su trasponte, han forrado con tela blanca una estructura de madera para poder acercarlo a la pira.
Mientras construyen la pira, al lado, llegan otros familiares con un cadáver. Es el de una señora mayor. Viene cubierto con una tela amarillo con estampados en color azafrán en los que se aprecia el signo de “OM” y la cara tapada por un paño blanco. Al llegar a la altura del agua, le quitan el paño de la cara y comienzan sus rituales de purificación en las aguas del Bagmati y lo dejan sobre una piedra a modo de tobogán con los pies sumergidos. Se queda así hasta que construyan la pira y empiece la cremación.
A parte de las cremaciones, hay otras personas con rituales también en este margen del río.
En el otro margen del río, unos impresionantes Ghats que están repletos de gente con sus rituales.
Por la parte de arriba, se han construido terrazas de piedra con jardines en los que se encuentran diseminados docenas de pequeños santuarios de Siva. Estos templos son el refugio de los sadhus errantes deambulan por la zona. Los "sadhus" son los santones que van originalmente maquillados, no les falta detalle.
En esta zona puedes pasarte horas, en cada dirección hay algo interesante que ver y observar. Solamente sentarte y ver a la gente que pasa, fijarte en los ritos que practica y disfrutar del momento merece la pena.
Algunos detalles:
Nueva parada: Bodhnath. Es un lugar precioso, es una preciosa estupa en medio de una plaza llena de tiendas y monasterios que tiene mucha actividad. Cientos de peregrinos se acercan a ella para dar la vuelta ceremonial a la cúpula bajo los atentos ojos de Buda.
Se encuentra en medio del barrio tibetano de Kathmandu, las calles que salen de esta plaza están llenos de monasterios y talleres donde se hacen todos los elementos rituales: lámpara de mantequilla, cuernos ceremoniales, tambores tibetanos, cuencos cantores, sombreros con plumas las los lamas y demás parafernalia budista.
Esta estupa es conocida ya desde antiguo, era una parada obligatoria en la ruta comercial entre Lhasa y Kathmandu en la que los comerciantes rezaban y pedian bendiciones para su viaje a través de los Himalayas.
Hoy esta zona está poblada por los tibetanos que huyeron de China a partir de 1959 pero también por sherpas descendientes de las tribus tibetanas que emigraron a Nepal en el S.XVI.
La estupa data del año 600, cuando el rey tibetano Songtsen Gampo se convirtió al budismo. Según la leyenda, construyó la estupa como penitencia por haber matado accidentalmente a su padre pero fue destruida por los mongoles en el S.XIV y posteriormente se construyó de nuevo.
La estupa es increíble, ahí en medio de la plaza, brillando al sol con su cúpula encalada, sus banderas de oración ondeando colgadas de la aguja que culmina su cúpula dorada sobre los ojos de Buda. Se permite subir un nivel para rodear la estupa. Y tener una visión de la plaza.
En el complejo hay varias personas orando entre los que hay occidentales que han adoptado el budismo como religión.
Rodeando la estupa hay una estructura metálica sobre la que reposan una serie de cuencos de latón, en algunos de ellos hay velas de mantequilla y en otros flores flotando sobre agua.
También hay una sala con lámparas de mantequilla, como la que vimos ayer en el templo de los monos.
El dorje (Rayo celestial) y las ruedas de oración tampoco faltan en este templo.
Paseando por la plaza encontramos a varias monjas budistas, hasta ahora solamente habíamos visto monjes
Se termina nuestro tiempo, hay que irse al aeropuerto. El aeropuerto no es muy grande pero embarcar es un horror: después de haber facturado y con tarjeta de embarque en mano, nos hacen 5 controles de equipaje antes de llegar al avión y en cada uno toca abrir la mochila, sacar todo y te cachean.
Volamos con la compañía KingFisher que es la de la cerveza nepalí, así que claro está, durante el vuelo te ofrecen cerveza.
Una vez despegado y superado el nivel de nubes, la vista es genial, sobre las nubes emergen los picos nevados de los Himalayas, es la mejor estampa para decir adiós al país.
El vuelo es corto y aterrizamos sin problemas en Delhi, pero nos esperan 9h hasta que salga el siguiente avión. Como tenemos visado de múltiple entrada, salimos e intentamos llegar a algún sitio de las afueras, cercano al aeropuerto, para tomar algo y que se haga mas corta la espera.
La visión hoy de Delhi es completamente diferente a la que tuvimos hace varias semanas cuando llegamos por primera vez, en aquel momento llovía, era de noche, todo parecía sucio y descuidado. Hoy es un día soleado, hay luz y parece otra ciudad.
El vehículo que tenemos empieza a tener problemas, se calienta y el conductor se para cada poco en medio de la autopista para poner agua al radiador, es impresionante pues no somos solamente nosotros los que nos paramos en medio, debe ser práctica habitual de la zona. Se termina el agua que tenía y decide hacer otra nueva parada al lado de una obra, sale el guarda y tras unos minutos nos da agua para conseguir regresar al aeropuerto, pues visto lo visto mejor tomar algo allí para asegurar que llegamos a tiempo a la puerta de embarque :).
Al llegar los paneles ya anuncian que nuestro avión va con 1,30 horas de retraso. Esto es un problema pues no tenemos ese margen en la escala de Amsterdam. Al ir a hacer el checking ya nos asignan un vuelo desde Amsterdam más tarde, lo malo es que nos vamos a tirar 6h en el aeropuerto.
Después del ajetreo del día, la espera en el aeropuerto, el retraso… cuando ya estamos sentados en el avión, por megafonía dicen que tenemos que bajar, que hay un problema técnico que lo han intentado arreglar pero que no lo han conseguido. Toca por tanto ir a recoger el equipaje y salir del aeropuerto, han preparado autobuses para acercarnos a un hotel próximo para dormir ya que si todo va bien, se reparará el avión y ya tienen asignado slot de despegue para el día siguiente a las 2 de la mañana.
Son las 4 de la mañana y vamos por el aeropuerto como autómatas, es la segunda vez en el mismo día que hacemos este recorrido hacia el control del pasaporte para salir de nuevo y en este caso con un problema añadido, el visado es múltiple pero solo permite 2 salidas la siguiente tiene que distar de la segunda al menos tres meses, así que oficialmente no podemos entrar en el país, toca contarle el problema al funcionario de turno y tras un rato escribe “INVALID” sobre el sello de entrega de esta tarde en el país.
Llegamos al hotel pasadas las 5:30 así que caigo catatónica en la cama, va a venir genial dormir un rato para recuperar fuerzas, mañana ya me preocuparé de cómo llego a España y como soluciono lo de no llegar el jueves a trabajar.
Información del Hotel:
Hotel sin nombre al lado del aeropuerto, aún está en construcción.
Valoración – Muy muy Buena
- Es un hotel muy occidental, aún lo están terminando de construir pero tienen abiertas algunas de las plantas.
- Las habitaciones son enormes, camas 2x2 y la mejor ducha de todo el viaje.
- La ubicación muy mala para visitar Delhi (aunque hay una parada de metro al lado) pero perfecta si lo que quieres es descansar para volver al aeropuerto
Miércoles 28 Junio (Delhi)
Hoy no desayunamos, es mejor intentar dormir para recuperarse del cansancio de nuestras peregrinaciones por aeropuertos.
A las 13:00 nos informan que tenemos ya asignado un nuevo vuelo, inicialmente a Amsterdan que saldrá a las 2:00 pero al final nos lo cambian por uno a Paría que sale a las 00:30 así que mejor.
Hasta las 20:00 que nos pasan a buscar para ir al aeropuerto mariposeamos por el hotel, fuera hace mucho calor y estamos muy lejos del centro así que esta es la mejor opción.
El checking y el paso por los controles son perfectos y como ya nos conocemos de memoria la terminal, es como estar en casa :)
Esta vez el avión sale a la hora y para nuestra sorpresa, dado el over-booking, nos toca clase preferente: más espacio para las piernas, perfecto para el viaje de vuelta a casa.
Jueves 29 Junio (Mi CASA)
Entre comidas, pelis y cabezadas el vuelo se hace cortito y llegamos a la hora estimada a París, así que con tranquilidad a buscar la terminal y la puerta de embarque para el siguiente vuelo a Madrid.
El vuelo de Madrid también sale puntual y seguimos teniendo “Clase Preferente” aunque en este caso, la verdad es que no hay mucha diferencia, pero bueno.
Las maletas llegan sin problemas, ahora si que se puede decir que ha sido un viaje de vuelta PERFECTO aunque lleguemos con 24h de retraso. Así que como oficialmente hoy trabajo al llegar a casa una ducha y a la ofi.
Ha sido una forma brusca de terminar las vacaciones, pero bueno, es lo que hay. Esto no resta así que mi valoración del viaje es buena aunque si volviera a empezar creo que me iría directamente a Nepal saltándome la India, pero ha sido interesante visitarla para al menos tener una opinión propia.
Ahora a pensar en el próximo destino.
Se encuentra en medio del barrio tibetano de Kathmandu, las calles que salen de esta plaza están llenos de monasterios y talleres donde se hacen todos los elementos rituales: lámpara de mantequilla, cuernos ceremoniales, tambores tibetanos, cuencos cantores, sombreros con plumas las los lamas y demás parafernalia budista.
Esta estupa es conocida ya desde antiguo, era una parada obligatoria en la ruta comercial entre Lhasa y Kathmandu en la que los comerciantes rezaban y pedian bendiciones para su viaje a través de los Himalayas.
Hoy esta zona está poblada por los tibetanos que huyeron de China a partir de 1959 pero también por sherpas descendientes de las tribus tibetanas que emigraron a Nepal en el S.XVI.
La estupa data del año 600, cuando el rey tibetano Songtsen Gampo se convirtió al budismo. Según la leyenda, construyó la estupa como penitencia por haber matado accidentalmente a su padre pero fue destruida por los mongoles en el S.XIV y posteriormente se construyó de nuevo.
La estupa es increíble, ahí en medio de la plaza, brillando al sol con su cúpula encalada, sus banderas de oración ondeando colgadas de la aguja que culmina su cúpula dorada sobre los ojos de Buda. Se permite subir un nivel para rodear la estupa. Y tener una visión de la plaza.
En el complejo hay varias personas orando entre los que hay occidentales que han adoptado el budismo como religión.
Rodeando la estupa hay una estructura metálica sobre la que reposan una serie de cuencos de latón, en algunos de ellos hay velas de mantequilla y en otros flores flotando sobre agua.
También hay una sala con lámparas de mantequilla, como la que vimos ayer en el templo de los monos.
El dorje (Rayo celestial) y las ruedas de oración tampoco faltan en este templo.
Paseando por la plaza encontramos a varias monjas budistas, hasta ahora solamente habíamos visto monjes
Se termina nuestro tiempo, hay que irse al aeropuerto. El aeropuerto no es muy grande pero embarcar es un horror: después de haber facturado y con tarjeta de embarque en mano, nos hacen 5 controles de equipaje antes de llegar al avión y en cada uno toca abrir la mochila, sacar todo y te cachean.
Volamos con la compañía KingFisher que es la de la cerveza nepalí, así que claro está, durante el vuelo te ofrecen cerveza.
Una vez despegado y superado el nivel de nubes, la vista es genial, sobre las nubes emergen los picos nevados de los Himalayas, es la mejor estampa para decir adiós al país.
El vuelo es corto y aterrizamos sin problemas en Delhi, pero nos esperan 9h hasta que salga el siguiente avión. Como tenemos visado de múltiple entrada, salimos e intentamos llegar a algún sitio de las afueras, cercano al aeropuerto, para tomar algo y que se haga mas corta la espera.
La visión hoy de Delhi es completamente diferente a la que tuvimos hace varias semanas cuando llegamos por primera vez, en aquel momento llovía, era de noche, todo parecía sucio y descuidado. Hoy es un día soleado, hay luz y parece otra ciudad.
El vehículo que tenemos empieza a tener problemas, se calienta y el conductor se para cada poco en medio de la autopista para poner agua al radiador, es impresionante pues no somos solamente nosotros los que nos paramos en medio, debe ser práctica habitual de la zona. Se termina el agua que tenía y decide hacer otra nueva parada al lado de una obra, sale el guarda y tras unos minutos nos da agua para conseguir regresar al aeropuerto, pues visto lo visto mejor tomar algo allí para asegurar que llegamos a tiempo a la puerta de embarque :).
Al llegar los paneles ya anuncian que nuestro avión va con 1,30 horas de retraso. Esto es un problema pues no tenemos ese margen en la escala de Amsterdam. Al ir a hacer el checking ya nos asignan un vuelo desde Amsterdam más tarde, lo malo es que nos vamos a tirar 6h en el aeropuerto.
Después del ajetreo del día, la espera en el aeropuerto, el retraso… cuando ya estamos sentados en el avión, por megafonía dicen que tenemos que bajar, que hay un problema técnico que lo han intentado arreglar pero que no lo han conseguido. Toca por tanto ir a recoger el equipaje y salir del aeropuerto, han preparado autobuses para acercarnos a un hotel próximo para dormir ya que si todo va bien, se reparará el avión y ya tienen asignado slot de despegue para el día siguiente a las 2 de la mañana.
Son las 4 de la mañana y vamos por el aeropuerto como autómatas, es la segunda vez en el mismo día que hacemos este recorrido hacia el control del pasaporte para salir de nuevo y en este caso con un problema añadido, el visado es múltiple pero solo permite 2 salidas la siguiente tiene que distar de la segunda al menos tres meses, así que oficialmente no podemos entrar en el país, toca contarle el problema al funcionario de turno y tras un rato escribe “INVALID” sobre el sello de entrega de esta tarde en el país.
Llegamos al hotel pasadas las 5:30 así que caigo catatónica en la cama, va a venir genial dormir un rato para recuperar fuerzas, mañana ya me preocuparé de cómo llego a España y como soluciono lo de no llegar el jueves a trabajar.
Información del Hotel:
Hotel sin nombre al lado del aeropuerto, aún está en construcción.
Valoración – Muy muy Buena
- Es un hotel muy occidental, aún lo están terminando de construir pero tienen abiertas algunas de las plantas.
- Las habitaciones son enormes, camas 2x2 y la mejor ducha de todo el viaje.
- La ubicación muy mala para visitar Delhi (aunque hay una parada de metro al lado) pero perfecta si lo que quieres es descansar para volver al aeropuerto
Miércoles 28 Junio (Delhi)
Hoy no desayunamos, es mejor intentar dormir para recuperarse del cansancio de nuestras peregrinaciones por aeropuertos.
A las 13:00 nos informan que tenemos ya asignado un nuevo vuelo, inicialmente a Amsterdan que saldrá a las 2:00 pero al final nos lo cambian por uno a Paría que sale a las 00:30 así que mejor.
Hasta las 20:00 que nos pasan a buscar para ir al aeropuerto mariposeamos por el hotel, fuera hace mucho calor y estamos muy lejos del centro así que esta es la mejor opción.
El checking y el paso por los controles son perfectos y como ya nos conocemos de memoria la terminal, es como estar en casa :)
Esta vez el avión sale a la hora y para nuestra sorpresa, dado el over-booking, nos toca clase preferente: más espacio para las piernas, perfecto para el viaje de vuelta a casa.
Jueves 29 Junio (Mi CASA)
Entre comidas, pelis y cabezadas el vuelo se hace cortito y llegamos a la hora estimada a París, así que con tranquilidad a buscar la terminal y la puerta de embarque para el siguiente vuelo a Madrid.
El vuelo de Madrid también sale puntual y seguimos teniendo “Clase Preferente” aunque en este caso, la verdad es que no hay mucha diferencia, pero bueno.
Las maletas llegan sin problemas, ahora si que se puede decir que ha sido un viaje de vuelta PERFECTO aunque lleguemos con 24h de retraso. Así que como oficialmente hoy trabajo al llegar a casa una ducha y a la ofi.
Ha sido una forma brusca de terminar las vacaciones, pero bueno, es lo que hay. Esto no resta así que mi valoración del viaje es buena aunque si volviera a empezar creo que me iría directamente a Nepal saltándome la India, pero ha sido interesante visitarla para al menos tener una opinión propia.
Ahora a pensar en el próximo destino.
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