Nápoles - S.Santa 206
Viaje 1/2
Llega la Semana Santa y
quiero tomarme unos días de vacaciones, tengo que gastar los días que aún me
quedan del 2015.
Este año organizo un viaje
con mi hermana y mis sobrinas, me apetece un viaje de chicas, va a ser
divertido viajar con ellas. El destino, después de mirar alternativas es
Nápoles, no es una ciudad que me llame la atención pero he encontrado un vuelo
a buen precio y eso marcar la decisión.
Me pongo a leer sobre la
zona y me voy animando, de pensar que me iba a sobrar tiempo paso a ver qué voy
a estar pillada con los 7 días para ver todo lo que quiero.
Lunes 21 Marzo: Madrid –
Nápoles
Llegamos sobre las 19:00 al
aeropuerto de Nápoles, tomamos un taxi para ir al hotel. Atravesamos la zona
portuaria y es un poco desolador, todo oscuro, en obras, sucio… espero que el
resto de la ciudad no sea así. Aunque el tráfico no es muy denso, se ve que
conducen como quieren incluido nuestro taxista, casi besas el suelo cuando
llegas para agradecer estar sana y salva :)
Dejamos las maletas en el
hotel y salimos a buscar algún sitio para cenar. No se ve nadie por la calle,
da una sensación de ciudad muerta y eso que estamos en el centro. Tomamos algo
rápido y a dormir que hay que descansar para empezar con energía la aventura
napolitana.
Información del Hotel:
Bovio Modern Suite Naples IT
- Dirección: Corso Umberto N.
22 (Neighbor Adidas Store) Nápoles
- e-mail: prenotazioni@bovio.eu
- Valoración: Buena
- Ubicación: Muy buena. No es exactamente un hotel,
es un piso en el que alquilan las habitaciones, es muy chulo y es muy
agradable. Es como estar en casa.
La parte mala es que no hay
recepción, la chica que atiende está unas horas al día pero terminada su
jornada laboral se va. Te dejan las llaves para que puedas entrar pero si las
pierdes a dormir bajo un puente :)
- Wifi: Hay wifi gratis y la
calidad de la señal es muy buena
- Desayuno: Muy bueno
Martes 22: Nápoles
Arriba prontito, después de
desayunar salimos a tomar el pulso a esta ciudad.
Algunas notas sobre
Nápoles:
Nápoles, Napoli en
italiano, es la ciudad más poblada del sur de Italia, capital de la región de
Campania. Tiene algo menos de un millón de habitantes, que, unido a los de su
área metropolitana, se elevan a 3,7 millones. Está situada a medio camino entre
el monte Vesubio y otra área volcánica, los Campos Flégreos al lado del golfo
de Nápoles.
Tiene una gran riqueza
histórica, artística, cultural y gastronómica, lo que llevó a la Unesco a
declarar su centro histórico Patrimonio de la Humanidad. Griegos, romanos,
normandos y españoles han dejado su huella en la ciudad. De mano de los
últimos, la ciudad fue el centro político del reino borbónico de las Dos
Sicilias. En las últimas décadas, Nápoles se ha dotado de una zona comercial
con rascacielos e infraestructuras como el TAV, hacia Roma, o una red de metro
en proceso de expansión. Por otra parte, también le acucian grandes problemas
como el crimen organizado, muy presente en la vida de sus habitantes y que
constituye un freno al desarrollo económico y social; o de otra naturaleza, las
fuerzas telúricas: la ciudad ha sufrido grandes terremotos y la actividad
volcánica es vigilada constantemente.
Toponimia:
Nápoles se construyó a unos
kilómetros de una ciudad ya existente, "Parténope" o
"Palépolis" (ciudad vieja). En la mitología griega Parténope era la
menor de las tres sirenas que desde las rocas de Capri intentaron con sus
cantos seducir a Odiseo que se ató al palo mayor consiguiendo así ser de los
pocos mortales en disfrutar de los bellos cantos sin morir ahogado después. La
sirena, desesperada, se ahogó de pena y su cuerpo llegó a la costa de la ciudad
vieja. Los colonos griegos sin embargo, prefirieron un área cercana que bautizaban
“Neápolis”, la ciudad nueva. Más tarde el término en napolitano pasó a
pronunciarse Napule y en italiano, Napoli.
Historia:
La historia de la ciudad
empieza con los griegos de Eubea, que a comienzos del siglo VIII a. C. fundaron
en la isla de Ischia, la que fue probablemente la primera colonia griega de
occidente. En ese mismo siglo, los colonos huyendo de importantes fenómenos
geológicos abandonaron la isla y fundaron la ciudad de Cumas. La gente de esta
ciudad fundó un siglo más tarde (siglo VII a. C.) la ciudad de Parténope en la
colina de Pizzofalcone. Posteriormente, al menos desde el siglo V a. C. los
griegos llamaron al lugar Neápolis.
El siglo XVI fue uno de los
períodos más prósperos de la historia napolitana. Los virreyes españoles, que
gobernaron el reino en nombre de Fernando II de Aragón, Carlos I y
posteriormente Felipe II, restablecieron el orden entre la nobleza local.
Pero sin lugar a dudas
Nápoles logra sus mejores tiempos durante el Siglo XVIII y XIX como capital del
Reino de las Dos Sicilias. Bajo la dinastía Borbón se realizan la gran mayoría
de los palacios y museos de la ciudad la cual paso a ser uno de los polos
culturales y de desarrollo industrial más importantes de Europa. Sin embargo,
después de la Unificación de Italia, las sucesivas malas administraciones
hicieron que la ciudad entrase en decadencia.
Después de la Segunda
Guerra Mundial, Nápoles empieza a crecer y sus pobladores desbordan ampliamente
el antiguo perímetro histórico y tiene que crecer.
El terremoto del 23 de noviembre
de 1980 provocó profundas trasformaciones en la ciudad.
Parece que estamos en otra
ciudad, nada que ver con la ciudad oscura y desolada de ayer. Hoy hace solecito
y la calle está llena de gente. Esto promete.
Empieza la visita:
1.- El Castillo Maschio
Angioino (Torreón de los Anjou).- También conocido como Castel Nuovo.
Fue construido entre 1279 y
1282 por Carlos I de Anjou, todo un récord, siendo el palacio real de su
dinastía. En tiempos de Roberto de Anjou, uno de los más notorios mecenas de su
tiempo, se hospedaron en el castillo grandes figuras de las artes y las letras,
como Petrarca o Boccaccio, que escribió el Decamerón entre sus muros. De esta
primera etapa no quedan restos, debido a la reestructuración realizada por los aragoneses.
El castillo posee cinco
torres que unen las gruesas murallas (Torre di Guardia, Torre di Mezzo, Torre
di San Giorgio, Torre del Beverello y Torre dell'Oro), y un arco de triunfo de
mármol (Arco d'Alfonso d'Aragona) que fue construido para celebrar la entrada
de Alfonso V de Aragón (I de Nápoles) en la ciudad el 26 de febrero de 1443.
La sala central del
castillo, es la monumental Sala dei Baroni (Sala de los Barones), así llamada
debido a que en el año 1487 fueron arrestados en este lugar, los Barones que
conspiraron contra Fernando I de Nápoles. Esta sala, en la actualidad es usada
para realizar las reuniones del consejo municipal y el Museo Cívico.
Otro episodio histórico
destacable es en 1504, tras conquistar la ciudad para la Corona de Aragón, el
Gran Capitán ejerció de virrey, hasta ser desposeído del título por Fernando el
Católico.
Pillamos la zona en obras,
están escavando y es complicado tener una vista del castillo sin pillar alguna
valla, pero aun así es impresionante.
2.- Galleria Umberto I.-Esta galería comercial se
construye entre 1887 y 1890 bajo una ley para sanear la ciudad dado que esta
zona tenía mala fama por estar llena de tabernas y prostíbulos, y en sus
callejas se cometían delitos de todo género.
Se trata de una galería con
cuatro brazos que se cruzan en un crucero octagonal, cubierto por una La bóveda
en vidrio y hierro, proyectada por Paolo Boubée.
Estas galerías son
similares a las de Milla aunque parecen una low-Cost ya que las de Milán sí que
continúan en su máximo esplendor alojando tiendas de lujo mientras que las de
Nápoles están en obras, gran parte de su fachada y sus paredes interiores están
cubiertas por lonas para tapar los andamios. Están es uso pues hay algunas
tiendas y cafeterías en sus locales comerciales aunque mucho negocio no parece
que tengan pues poca gente, si quitamos los turistas, pasea por la zona.
3.- La Piazza del
Plebiscito.- Es una de las mayores plazas
de la ciudad, se encuentra entre el Palacio Real y el Teatro San Carlo,
formando una elipse en medio de la cual se erigen dos estatuas ecuestres, una
de Carlos III, obra de Antonio Canova, y Fernando I conmemorando el regreso al
poder de la Casa de Borbón, tras la ocupación napoleónica y el gobierno de
Murat.
Tras la demolición en 1809
de los conventos en el Largo di Palazzo, se usa el espacio para construir la
plaza. La intención fue crear una plaza para ser centro de las actividades
políticas, religiosas, económicas y culturales de la ciudad.
Desde 1994, cuando Nápoles
hospedó la cumbre del G7, la plaza dejó de utilizarse como aparcamiento y
recuperó su antigua importancia como espacio público, dónde con frecuencia se
celebran conciertos, manifestaciones y hasta representaciones de ópera en
Navidad.
En esta plaza se encuentra:
- La Basílica de San
Francisco de Paula.- Aunque este edificio se construyó para otros fines, ha
terminado siendo usado para fines religiosos. Se trata de la más importante
iglesia italiana del período neoclásico. Por su forma circular, recuerda el
Panteón de Agripa. Su fachada está precedida por un pronao formado por seis
columnas y dos pilares de orden jónico.
En el interior, está la
capilla de Sansevero o Templo de la Piedad, del siglo XVIII, donde se conserva
un famoso Cristo Velado de Giuseppe di San Martino y unas extrañas
"máquinas anatómicas" vinculadas a la oscura historia del príncipe
Raimondo di Sangro.
- El Palacio Real de
Nápoles.- Fue mandado construir en 1603 por el virrey de Nápoles, el Conde de
Lemos, en previsión de una posible visita del rey Felipe III de España a la
ciudad que no se llegó a hacer nunca. El proyecto sufrió numerosos cambios y no
da por concluida su construcción hasta la mitad del siglo XIX.
El Palacio Real de Nápoles
fue el centro de la vida política y social napolitana. En 1734 se llevan a cabo
las primeras obras de restauración dado su pésimo estado de conservación. A
partir de entonces, se suceden varias remodelaciones que aproximan al Palacio a
un estilo más barroco.
Desde 1919 alberga la
Biblioteca Nacional.
Pillamos el palacio en
obras, está toda su fachada cubierta por una lona que tapa los andamios.
Salimos de la plaza y nos
encaminamos hacia el mar. Es muy agradable pasear por el litoral disfrutando de
los edificios y del mar. Hay muchas pequeñas barquitas atracadas y gente
pescando.
Llegamos a un pequeño
puerto lleno de barquitas desde el cual hay unas bonitas vistas del Castillo dell’Ovo.
4.- El Castel dell'Ovo
(Castillo del Huevo).
Se llama así porque, según
la leyenda, Virgilio habría escondido en el interior del castillo un huevo que
soportaría la estructura del edificio, y que, de romperse, provocaría el
hundimiento de la fortaleza y grandes catástrofes para la ciudad.
Está situado en el islote
de Megaride, donde en el siglo VII a. C. desembarcaron los cumanos que fundaron
Parténope. El castillo era parte de la villa del romano Lucio Licinio Luculo,
esta villa fue más tarde fortificada por Valentiniano III y albergó al depuesto
Rómulo Augusto, último emperador romano.
La lujosa villa fue
arrasada por los propios napolitanos en el siglo X para evitar su captura por
los sarracenos.
Más tarde el castillo fue
reconstruido y restructurado por los normandos (1128) y por los españoles.
Hoy está abierta al público
para que se puede ver su majestuosidad como fortaleza, la terraza con cañones y
la característica villa marina al pie del castillo.
La entrada es libre, merece
la pena pasear por sus callejones
y disfrutar de las vistas
desde sus almenas.
Paramos a comer en una
terracita, es la primera toma de contacto con la pizza napolitana, no es la
comida que más me gusta pero hay que reconocer que está muy buena.
En frente tenemos aparcado
un coche que se cae a cachos y es literal. Es habitual ver coches destrozados,
supongo que es normal dado como conducen y las calles tan estrechas que tienen.
Después de comer sigue el
paseo, ahora por Vía Francesco Caracciolo. El tiempo empieza a cambiar y llueve
a ratitos, pero se puede seguir paseando sin problema.
A destacar las escolleras
construidas con grandes piedras blancas en las que hay grafitis y pintadas que
le dan colorido.
Llegamos al final del
paseo, hay un pequeño puerto deportivo y también unas filas de casetas de
playa.
Volvemos al centro, como
está medio lloviendo, en vez de volver andando probamos el metro de la ciudad
para conocerlo. La realidad es que es un poco complicado ya que mezclan líneas
de metro con otras de tren y las indicaciones brillas por su ausencia.
Los billetes son diferentes
si solo tomas una línea o tienes que tomar más de una y está complicado
cómpralos, no hay (al menos en esta estación) ni taquilla ni máquina para
comprarlos, hay que ir a una tienda prensa de la estación donde nos los
venden. En esta línea, los vagones son
viejos y llenos de pintadas, al cambiar de línea se nota la diferencia.
Bajamos en la estación
“Toledo” que es nueva y está muy chula
Al salir a la calle llueve
por lo que buscamos un lugar para tomar un café, descansar y esperar a que
pare.
Ya no lleve, salimos y
dedicamos lo que queda de tarde a callejear por la zona, descubriendo
callecitas y bonitos rincones. La zona está muy animada y hay mucha gente.
Hora de cenar y a dormir,
mañana más.
Miércoles 23 de Marzo:
Sorrento
Después de desayunar y
aunque el día está encapotado ponemos rumbo a Sorrento. Vamos andando hasta la
estación de tren Garibaldi para tomar la “Circumvesuviana” que nos lleva a
Sorrento.
Esta línea de tren es
cómoda, barata y la mejor forma para llegar a Sorrento. La misma línea es la
que te lleva a Pompeya y a Herculano y eso se nota por la cantidad de turistas
que suben al vagón. Sorrento es la última parada de la línea, te puedes relajar
y no ir preocupado de por qué estación vamos :)
Cuando llegamos a Sorrento está lloviznando, así que a sacar el chubasqueroy el paraguas y a patear.
Cuando llegamos a Sorrento está lloviznando, así que a sacar el chubasqueroy el paraguas y a patear.
Algunas notas sobre Sorrento:
Sorrento es un pueblo de la región de Campania de unos 16.500 habitantes. Es un importante destino turístico, sus lujosos hoteles han atraído a famosos como Enrico Caruso y Luciano Pavarotti.
Se encuentra en la costa septentrional de la península Sorrentina con impresionantes vistas del golfo de Nápoles y del monte Vesubio.
Sorrento es un pueblo de la región de Campania de unos 16.500 habitantes. Es un importante destino turístico, sus lujosos hoteles han atraído a famosos como Enrico Caruso y Luciano Pavarotti.
Se encuentra en la costa septentrional de la península Sorrentina con impresionantes vistas del golfo de Nápoles y del monte Vesubio.
Historia:
Dice la leyenda que el
nombre de Sorrento deriva de las míticas sirenas que con sus cantos hacían que
los navegantes naufragaran en sus rocas. Aunque su origen es griego, pasó a
manos de los romanos en el año 89 a. C.
Por su ubicación, la ciudad
era muy segura al estar rodeada por profundos desfiladeros y disponer de una
muralla de 270m que securizaba la unión de la península. Esto era muy
importante dado la gran cantidad de piratas que surcaban el Mediterráneo.
Fue sede arzobispal a
partir del año 420 y en 552 pasó a manos de los bizantinos.
En 1337 el ducado de
Sorrento fue incorporado al reino normando y más tarde pasó a formar parte del
Reino de Sicilia.
En 1799, entró a formar
parte de la República Napolitana y
finalmente, en 1861 Sorrento, fue oficialmente anexionada al nuevo Reino
de Italia.
La Sorrento actual:
El centro histórico de la
ciudad muestra todavía el trazado ortogonal de las calles de origen romano y
hacia el monte, aún se encuentran los restos de las antiguas murallas del siglo
XVI.
Entre los lugares con
interés para ser visitados se encuentran:
1.- El Duomo, reedificado
en el siglo XV, con fachada neogótica.
2.- La iglesia de San
Francisco de Asís, con un notable fresco del siglo XIV.
3.- El museo Correale donde
se pueden ver los hallazgos griegos y romanos y de porcelanas napolitanas de
Capodimonte, con una sección de pintura de los siglos XVII - XIX. Desde sus
jardines, además, se disfruta de una magnífica vista sobre el golfo.
4.- Cerca de la Punta del
Capo, a 3 km hacia el oeste, se encuentran restos romanos, supuestamente la
villa de Polio Félix (Siglo I).
Arranca la vista, empezamos
callejeando por la zona del centro. Son calles estrechas y están llenas de
tiendas orientadas al turista. Destaca la cantidad de productos relacionados
con los limones, Sorrento es famoso por sus cultivos de limoneros.
Recomiendo probar los
caramelos de limón, espectaculares.
Bajamos hasta el puerto.
Aunque está encapotado las vistas son espectaculares.
Desde este puerto se pueden
tomar ferris para Capri y para Ischia. Es una pena que el día esté cubierto
pues si pillamos un día claro se tiene que tener una vista perfecta de Capri ya
que está a unos pocos Km de la costa de Sorrento.
Algunas fotos del puerto:
Subimos de nuevo a la
ciudad, seguimos paseando y disfrutando de sus calles y de sus vistas.
Es hora de comer, hacemos
un alto en camino para reponer fuerzas. Esta ciudad está 100% orientada al
turismo así que restaurantes no faltan aunque aún no está todos abiertos pero
hay para elegir.
Tras la comida nos
acercamos a la zona de las murallas, hay una zona visitable pero está cerrada y
solamente podemos verla desde la verja.
Damos por terminada la
visita a Sorrento, el tiempo no ha acompañado para poder hacer alguna caminata
por los alrededores, habrá que apuntarlo como punto pendiente en una próxima
visita a la zona.
Otras imagenes de Sorrento:
Otras imagenes de Sorrento:
Tomamos el tren para volver a Nápoles. Cuando llegamos ya ha oscurecido, pasamos por el hotel para dejar cosas y salimos de nuevo.
Está jarreando, así que
paraguas en ristre a recorrer la zona del casco antiguo para encontrar algún
sitio para cenar y después a dormir.
Jueves 24 de Marzo: Nápoles
Arriba prontito, desayuno y a disfrutar de Nápoles.
Las visitas del día son:
1.- Museo Arqueológico
Nacional de Nápoles:
Este museo se crea para
mostrar las piezas de mármol que Carlos de Borbón había heredado de su madre.
El museo crece tras el descubrimiento de Pompeya con todas las piezas
encontradas el en yacimiento romano.
Actualmente, hay una gran
cantidad de mármoles, mosaicos y manufacturas de la época romana y algunas de
las momias mejor conservadas del mundo.
El edificio donde se aloja
el museo, se empezó a construir en 1585 y tiene en si un gran interés
arquitectónico, de hecho, es uno de los principales palacios monumentales de
Nápoles.
Podemos visitar:
- Mármoles.- Es una colección
de escultura griega y romana, procedente diferentes yacimientos en torno al
Vesubio y en los Campos Flégreos así como de colecciones privadas, siendo la
más importante la Colección Farnesio que consta de un grupo de esculturas que
Fernando IV heredó de su abuela Isabel de Farnesio.
- Mosaicos.- Esta sección,
única en su género, está formada por fragmentos de la decoración del suelo y las
paredes de Herculano, Pompeya y Estabia, con emblemas, escenas y figuras de
inspiración griega.
Destacan los mosaicos de la
Casa del Fauno (Pompeya), con una famosa escena de la batalla de Issos entre
Alejandro Magno y las tropas de Darío.
- Frescos.- Proceden de las
casas de Pompeya y muestran un rico panorama de la pintura decorativa romana
entre los siglos II a. C. y I d. C., fiel sucesora de la pintura griega.
- Templo de Isis.- Se muestran las pinturas murales extraídas del Templo de Isis de Pompeya, realizadas en un estilo helenístico de tradición romana pero con muchas características egipcias, además de esculturas, inscripciones y objetos de culto.
En el museo hay también un
notable conjunto de piezas de plata encontrados en la Casa del Menandro
(Pompeya), único por su variedad y la calidad de su artesanía. En cuanto al
marfil y la cerámica vidriada, se incluyen piezas de juegos, utensilios de uso
cotidiano, ornamentos y objetos de tocador. Así mismo se exhiben vasijas de
bronce.
- Villa de los Papiros.- En
esta sala se recogen todas las obras de arte encontradas en la villa de
Herculano del siglo I d. C., que se cree que perteneció a los Pisones. Destacan
las estatuas de bronce, pero faltan los cerca de dos mil rollos de papiro con
textos griegos que le dan nombre y que se conservan en la Biblioteca Nacional
de Nápoles.
- Lupanar.- En esta sala
están recopilados objetos encontrados en el lupanar que muestra escultura y
pintura erótica de la época con imágenes totalmente explicitas.
El museo también aloja una
colección egipcia en la que hay varias momias.
Otras imágenes del museo:
A parte de estas
colecciones, hay una exposición, asumo que temporal basada en Batman que no
pega ni con cola. Hay una sala con cuadros y en uno de los patios hay varias
estaturas.
El museo es interesante
pero no tanto como había esperado y lo que no entiendo es que a primera hora
algunas de las alas del edificio estaban cerradas, siendo las salas cerradas
donde se encuentran los mosaicos y frescos así como los tesoros de la Villa de
los Papiros. Nos indican que es lo normal, que estas salas se abren solo por la
tarde y que se puede volver a entrar con la misma entrada. Así que dejamos
pendiente esta parte de la visita para la tarde.
En resumen: la visita es
interesante pero si tienes poco tiempo en Nápoles recomiendo perderse por sus
calles y disfrutar de ellas antes que venir al museo.
Salimos del museo, el
siguiente objetivo son las catacumbas. Vamos andando, es solamente seguir la
calle “Corso Amadeo Di Savoia” hasta las Catacumbas de San Genaro. Al llegar
nos indican que las visitas son guiadas (puedes elegir: inglés o italiano) y
como falta media hora para que empiece la siguiente salimos a ver los
alrededores de esta zona alta de la ciudad.
Subimos la escalinata hasta
el parque “Campo di Monti” desde donde hay buenas vistas de la ciudad.
Volvemos para llegar a
tiempo a nuestra visita.
2.- Catacumbas de San
Genaro:
Originalmente, en Nápoles
existían tres cementerios, estaban dedicados a: San Gaudioso, San Severo y San
Genaro.
Las catacumbas de San
Genaro tiene dos niveles, el inferior es el más antiguo, se remonta a los
siglos III y IV y podrían haber sido el lugar de un cementerio pre-cristiano
más antiguo. Se convirtió en un
importante centro religioso de entierros después de ser el lugar de entierro de
Agripino (obispo de Nápoles y primer
santo patrón de Nápoles).
Las catacumbas fueron
consagradas a San Genaro (santo patrón de la ciudad) en el siglo V cuando
sepultaron allí sus restos aunque posteriormente fueron trasladados a la
Catedral de Nápoles. Hasta el siglo XI, las catacumbas fueron el lugar de
entierro de los obispos de Nápoles. Entre el siglo XIII y el siglo XVIII,
fueron objeto de graves saqueos. La restauración de las catacumbas se inició
después del traslado de los restos a otro cementerio.
El sitio es espectacular,
merece la pena la visita, la entrada está en la parte trasera de la Basílica de
la Madre del Buen Consejo.
Empezamos la visita por la
planta superior, tiene salas amplias con grandes arcadas. Hay nichos en las pareces
y en el suelo.
Bajamos a la planta
inferior, es espectacular.
En las paredes se conservan
frescos
A la salida de las
catacumbas entramos en la iglesia hoy convertida en sala de exposiciones. Se
puede salir por donde hemos entrado o aprovechar a salir por el hospital,
elegimos esta segunda opción ya que nos evita volver a tener que dar la vuelta
y nos permite callejear por esta zona de la ciudad.
La fachada del hospital es
muy chula.
3.- Cementerio de la
Fontanelle:
Este cementerio es una de
las sorpresas que esconde Nápoles, no es muy conocido y no suele aparecer
dentro de las visitas destacadas. Se trata de una antigua cantera de tufo que
acabó "acogiendo" entre los siglos XVI y XVIII millares de restos
humanos de gente muerta por peste, terremotos, enfermedades o simplemente
demasiado pobre para poderse permitir una sepultura digna.
El lugar ha cobrado una
especial importancia para los napolitanos, dado la importancia que tiene en su
día a día el culto a los muertos.
Así que entre leyendas,
cuentos del terror y fantasmas aquí se puede descubrir una faceta poco conocida
pero muy reveladora de la ciudad de Nápoles.
4.- Puerta de San Genaro:
Volvemos al puente y
empezamos a bajar hacia el museo callejeando. En esta zona hay un mercadillo,
la verdura tiene muy buena pinta.
Se nota que es Pascua, en
muchos puestos se venden enormes huevos de pascua. Tienen demanda, casi todo el
mundo lleva uno en la bolsa de la compra.
Bajamos hasta una de las
antiguas puertas de la ciudad, la puerta de San Genaro.
Volvemos al museo, está de
paso y aprovechamos a ver las salas que esta mañana estaban cerradas, la verdad
es que merece la pena pues son las de mosaicos y frescos procedentes de Pompeya
y de Herculano.
Cuando salimos del museo ya
ha oscurecido. Es el momento para seguir paseando por el centro e ir a cenar
algo.
Viernes 25 de Marzo: Pompeya
Arriba prontito, el objetivo del
día es Pompeya. Tomamos la Circumvesuviana y si obviamos que hoy va a tope, el
tren es cómodo.
Algunas notas sobre Pompeya:
Pompeya (en latín: Pompeii) es
una ciudad de la Antigua Roma ubicada junto con Herculano y otros lugares más
pequeños en la región de Campania, cerca de la actual ciudad de Nápoles.
Es conocida mundialmente porque
fue enterrada durante la violenta erupción del Vesubio el 24 de agosto del año
79 d. C. y sus habitantes fallecieron debido al flujo piroclástico.
Historia:
Ya desde el Siglo VII a. C. había
presencia humana en la zona y es en el siglo VIII a.C. cuando empiezan a
aparecer colonias griegas en la región, destacando la importante ciudad de
Cumas, al otro lado del golfo de Nápoles.
Los etruscos llegan en siglo VII
a.C. y durante más de 150 años rivalizaron con los griegos por el territorio.
Pompeya participó en la guerra
que las ciudades de la Campania iniciaron contra Roma y terminó siendo una
colonia con el nombre de Colonia Cornelio Veneria Pompeianorum.
Pompeya estaba a orillas del río
Sarno y en su puerto atracaban los buques mercantes que recogían los productos
agrícolas y las manufacturas que eran enviadas hacia Roma o hacia el sur de
Italia siguiendo la cercana Vía Apia.
En año 59 d.c. se produjeron
serios disturbios en el anfiteatro de la ciudad entre los pompeyanos y unos
visitantes de Nuceria, que tuvieron como resultados varios muertos y heridos.
El enfrentamiento fue de tal magnitud que llegó a oídos del emperador Nerón y
prohibió las exhibiciones de gladiadores en la ciudad durante 10 años.
En el año 62 un fuerte terremoto
dañó seriamente Pompeya y otras ciudades cercanas y la ciudad tuvo que ser
reconstruida.
En el relato de Plinio el Joven
aparece como fecha para la erupción el 24 de agosto de 79 pero puede que no sea
correcta y se deba a un error de transcripción durante la Edad Media. Se
trataría del 23 de noviembre del mismo año ya que algunos expertos opinan que
no pudo ser en verano sino en otoño o invierno, dada la gran cantidad de frutos
otoñales hallados entre las ruinas y por una moneda encontrada cuya fecha de
acuñación no pudo ser anterior a septiembre de 79. Algunos cuerpos también
muestran túnicas y mantos gruesos, propios de un mes más frío y no de agosto.
Los detalles de la erupción y la
destrucción de la ciudad los conocemos gracias al testimonio de Plinio el Joven
que fue testigo de los hechos y los plasmó con detalle en sus famosas cartas a
Tácito y que constituyen el primer testimonio conocido de un testigo visual de
una erupción volcánica.
La zona sufrió temblores de
tierra durante varios días y se secaron los manantiales, señales inequívocas
del aumento de presión en el interior del cráter. Después, probablemente un
poco antes del mediodía del 24 de agosto, hubo una gran explosión.
En el monte se abrió otro cráter
y un chorro de gas caliente arrojó millares de toneladas de piedras, en gran
parte al rojo vivo, a miles de metros de altura, fenómeno que se prolongó
cierto tiempo. Una nube en forma de paraguas (seguramente parecida a la que
desencadenan las explosiones nucleares) ocultó el sol, y a continuación los
detritos empezaron a caer al suelo.
A media tarde, Pompeya quedó
enterrada bajo seis metros de piedra pómez y cenizas. Murieron unas 2.000
personas, algunas aplastadas por las piedras, pero sobre todo asfixiadas por
los gases o sofocadas por las cenizas.
En Herculano las cosas fueron
diferentes, se libraron de la lluvia de cenizas pero fue arrollada por el barro
ardiente, que la sepultó a 15m de profundidad, endureciendo como una roca todo
cuanto en ella había. El proceso fue lo suficientemente lento como para que la
gente de Herculano tuviera tiempo de huir: en Herculano sólo se han encontrado
20 ó 30 esqueletos.
A parte de Pompeya y Herculano,
también quedaron arrasadas varias ciudades y aldeas cercanas, y en un par de
horas desapareció de la faz de la tierra una sociedad entera.
Pompeya siguió sepultada hasta
que en 1763 se descubrió su emplazamiento.
Historia de los trabajos
arqueológicos:
Tras la erupción, gruesas capas
de ceniza cubrieron las ciudades situadas en la base de la montaña y sus
nombres y localizaciones exactas acabaron olvidados con los siglos y no es
hasta 1738 cuando se re-descubre Herculano y en 1748 Pompeya.
El interés por Pompeya empieza
con el rey Carlos VII de Nápoles (más conocido como Carlos III de España) que
de la mano del aragonés Roque Joaquín de Alcubierre, empezó las excavaciones en
la zona en búsqueda de tesoros y restos arqueológicos para llenar su museo.
Desde entonces, se han sucedido
excavaciones con criterios cada vez más científicos y no ya como meros cofres
de tesoros.
Las ruinas fueron objeto de
varias campañas de bombardeo por parte de los Aliados en 1943, que destruyeron
buena parte del Teatro Grande y del Foro, así como algunas casas, que fueron
convenientemente restauradas una vez finalizada la Segunda Guerra Mundial.
Aunque la ciudad se ha conservado
en un estado envidiable bajo la capa de cenizas, hay que tener en cuenta que
durante la erupción los edificios vivieron un fenómeno muy parecido a un
bombardeo, motivo por el cual la mayoría de los tejados se vinieron abajo y
muchas edificaciones grandes estaban muy
deterioradas.
Durante las excavaciones, se
encontraron huecos en la ceniza solidificada que se habían creado al quedar
atrapada en ella cuerpos humanos, animales o cualquier otro tipo de materia
orgánica que había terminado descomponiéndose y desapareciendo pero el hueco
con la forma se mantiene. En 1860, el arqueólogo italiano Giuseppe Fiorelli
sugirió rellenar estos huecos con yeso, obteniendo así moldes que mostraban con
gran precisión el último momento de la vida de los ciudadanos que no pudieron
escapar a la erupción. En algunos de ellos la expresión de terror es claramente
visible. Otros se afanan en tapar su boca o la de sus seres queridos con
pañuelos o vestidos tratando de no inhalar los gases tóxicos, y alguno se
aferra con fuerza a sus joyas y ahorros. Tampoco falta quien prefirió ahorrarse
el tormento quitándose la vida, conservándose su cuerpo junto a pequeñas
botellitas que contenían veneno.
A estas esculturas creadas con el
yeso se las llama “Vaciados”, los encontrados en Pompeya son:
- Vaciado de los gladiadores.- Es
un grupo de gladiadores del anfiteatro acompañados de una misteriosa mujer
cargada con todas sus joyas de gala.
- Vaciado en yeso de un perro – En
la angustia de la huida, nadie pensó en el perro de Vesonio, que quedó atado a
la cadena. Mientras caía la ceniza el pobre animal intentó liberarse por todos
los medios posibles, retorciéndose para romper la cadena, que resistió a sus esfuerzos. Las emanaciones le
produjeron la muerte y permaneció para siempre junto a su puerta.
- Vaciado en yeso de una rueda –
Esta rueda fue, quizá, montada en su eje con demasiada prisa y puede haber
saltado mientras el vehículo intentaba abandonar la ciudad; fue tal vez obra de
un artesano que la habría dejado provisionalmente a la puerta de su tienda. La
madera se fue deshaciendo lentamente, y sólo quedó su huella en la lava.
- Vaciado en yeso de un árbol – Más
allá de la Puerta Stabiana crecía un frondoso laurel. El vaciado en yeso de
este árbol se halla en un ángulo de la última sala, que da a Puerta Marina.
- Vaciado en yeso de un mulatero –
Es el vaciado de una figura humana: la de un mulatero que había buscado refugio
contra la lluvia de ceniza y de casquijo de lava, acurrucándose en un rincón.
El pobre hombre intentó protegerse envolviéndose en su tosca capa y tapándose
la boca con un borde de ella, para defenderse de los gases mefíticos. En este
vaciado no se observa el dramatismo que muestran el del perro y el de la joven:
el hombre parece dormido.
Un testimonio único:
La ciudad ofrece una foto de la
vida romana durante el siglo I. Se ha inmortalizado hasta el mínimo detalle de
la vida cotidiana. Por ejemplo:
1.- En el suelo de una de las
casas (la de Sirico), una famosa inscripción Salve, lucrum ("Bienvenido,
dinero"), quizás con intención humorística, nos muestra una sociedad
comercial perteneciente a dos socios, Sirico y Numiano.
2.- En otras casas abundan los
detalles sobre diversos oficios, como los trabajadores de la lavandería.
3.- Las pintadas grabadas en las
paredes son muestras del latín coloquial empleado en la calle.
Pompeya tenía entre 10.500 y
15.000 habitantes en el 79 pero solo se han encontrado unos 2.000 cadáveres y
muchos de los edificios están extrañamente vacíos, lo que hace pensar que gran
parte de la población habría huido ya durante los terremotos que precedieron a
la erupción llevándose con ellos una parte de sus objetos de valor.
Se explican así, además, algunos
de los tesoros que se han hallado en la ciudad, los ciudadanos que huyeron los
debieron esconder son el fin de recuperarlos cuando los problemas pasaran.
También hay pruebas de que la
ciudad fue saqueada (por sus antiguos habitantes o por otras personas) durante
los meses e incluso años siguientes, a fin de recuperar sus pertenencias para
lo que excavaron túneles entre las cenizas endurecidas.
La ciudad estaba situada en una
zona donde abundaban las villas de vacaciones y contaba con numerosos
servicios:
1.- El macellum (gran mercado de
alimentos)
2.- El pistrinum (molino)
3.- Los thermopolia (una especie
de taberna que servía bebidas frías y calientes)
4.- Las cauponae (pequeños
restaurantes)
5.- Un anfiteatro.
En 2002 un importante
descubrimiento, en la desembocadura del río Sarno, reveló que en el puerto
también había viviendas, muchas de ellas palafitos con un sistema de canales
que sugieren una cierta similitud con Venecia.
Urbanismo:
Pompeya es la única ciudad
antigua cuya estructura topográfica se conoce de forma precisa, sin
modificaciones posteriores. No estaba distribuida en un plano regular como
solía ocurrir con las ciudades romanas, debido a la irregularidad del terreno.
Pero sus calles eran rectas y formaban una rejilla al más puro estilo romano,
con su cardo y sus dos decumanos.
El sector sudoeste, no obstante,
presenta un trazado irregular, se trata del antiguo asentamiento osco que
creció hasta convertirse en Pompeya. El trazado de la muralla ya estaba
definido en el siglo VI a.C. y probablemente también el de las principales
calles, aunque incluso en el año 79 permanecían en la ciudad, especialmente en
el sector oriental, numerosos descampados y cultivos, que muestran que el
espacio intramuros nunca estuvo muy densamente poblado.
Se han encontrado inscripciones
de carácter público grabadas en mármol y también pintadas en los muros. Era un
rasgo característico de la vida ciudadana; todos los acontecimientos tales como
las elecciones para los cargos municipales, los espectáculos del anfiteatro,
los alquileres de casas o terrenos, la búsqueda de un animal perdido… se
anunciaban mediante carteles en las paredes.
También se grababan en la pared,
con la punta del estilo o de cualquier instrumento aguzado, las cuentas del
hostelero, las deudas de la clientela, las fechas de los viajes del hombre de
negocios, los pensamientos, las invitaciones, los recuerdos de los enamorados,
los signos del abecedario de los escolares, los ultrajes, las caricaturas, las
aclamaciones o los insultos de los espectadores del anfiteatro.
Llegamos a la entrada del
yacimiento y toca hacer una súper cola para conseguir entrada. En la oficina de
información te dan un plano y un librito que contiene información de todas las
casas y sitios a visitar con una descripción de los mismos. Un 10 a esta
información ya que te ayuda a disfrutar de la visita. También hay opción de usar audio-guías aunque
nos recomendaron no tomarla porque no era muy buena.
Empieza la visita:
1.- Foro:
El foro, como en toda ciudad
romana, era el centro cívico y el corazón de la vida comercial de Pompeya. Era
un amplio espacio abierto con forma rectangular rodeado en tres de sus lados
por una columnata y en el otro por el Templo de Júpiter, con varios edificios
públicos importantes en torno a él.
Constaba de un área libre de 145
m de longitud por 38 m de anchura, estaba pavimentada en piedra. En ella se
erguían estatuas conmemorativas del emperador, de miembros de su familia o de
destacados ciudadanos locales.
Era típico ver en el foro mesas o
banquetas donde los vendedores exponían sus productos al público; se colocaban
en los bordes de la zona libre, junto a las columnatas y cuando llovía se
trasladaban a los corredores, unos pasillos que estaban techados donde la gente
paseaba y solía negociar.
Al foro se accedía por una gran
puerta de bronce. Dentro del foro no se permitía la circulación de carruajes.
En el foro había tablillas
expuestas al público donde se escribían noticias importantes de la época, como
el resultado de las últimas elecciones o la fecha de algún espectáculo, e
incluso había gente que aprovechaba para exponer sus quejas o para hacer
publicidad de su establecimiento. Un ejemplo encontrado de ellos es:
"Macerior ruega al edil que prohíba a la gente hacer ruido en la calle y
moleste a las personas decentes que están durmiendo".
En la zona del foro hoy hay unos
recintos donde se guardan hallazgos arqueológicos de la ciudad, algunos son
originales y otros son copias como es el caso de los vaciados con las siluetas
de los muertos por la erupción, los originales están en museos. Destaca la
cantidad de ánforas perfectamente colocadas en estanterías.
También hay una serie de
esculturas modernas que representan cabezas y que contrastan con el lugar
histórico y le dan encanto.
2.- Templo de Júpiter:
El templo de Júpiter cierra la
plaza del Foro por el lado norte. Si bien en su origen fue solo dedicado a
Júpiter, después del año 80 a. C. fueron también veneradas en él las diosas
Juno y Minerva, formando así la llamada tríada capitolina que era la protectora
de Roma y del imperio. El templo data del siglo II a. C. y fue gravemente
dañado en el terremoto del año 62 d. C. y estaba siendo restaurado al momento
de la erupción del Vesubio.
3.- Arcos Honorarios:
En Pompeya había varios arcos
honorarios, dos de ellos se encontraban en la parte norte del Foro a ambos
lados del Templo de Júpiter y estaban construidos de ladrillo.
Del arco de la parte oriental
solo quedan restos, estaba dedicado a Calígula (37-42 d.C) y lo destruyeron
tras su muerte. El otro, estaba dedicado a Druso, hijo del emperador Tiberio
que aunque sufrió daños en el terremoto del 62 fue reconstruido.
En la zona donde estaba el de
Calígula, se construyó uno nuevo en honor a Germanico.
En la época de Tiberio (14-37
d.C) se construyó un nuevo arco cerca del templo de la Fortuna Augusta y que
cerraba la secuencia de edificios dedicados al culto.
4.- Macellum:
El Macellum era el gran mercado
de alimentos, dotado con una fuente de agua en el centro donde se lavaban los
pescados. Fue construido ya en la época del Imperio.
5.- Edificio de Eumaquía:
Este edificio albergaba al gremio
de tintoreros y lavanderos, toma su nombre de la sacerdotisa Eumaquía que
patrocinó su construcción y fue dedicado a la Concordia y a la Piedad Augusta,
así como a Livia, esposa del emperador Augusto, tal como reza una inscripción
en el arquitrabe del pórtico.
Lamentablemente, esta
construcción sufrió grandes daños durante el terremoto del año 62, y los
trabajos de restauración no estaban muy avanzados cuando ocurrió la erupción
del Vesubio.
En el patio fue hallada la
estatua de Eumaquía que hoy se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de
Nápoles.
6.- Basílica:
La basílica de Pompeya era la
sede de la administración de justicia y, junto con el Foro, constituía el
edificio más importante de la ciudad. Tenía cinco puertas que abrían hacia el
Foro y daban paso a tres naves internas. Fue construida sobre el 120 a. C.
Este espacio estaba ornamentado
con una estatua ecuestre y en las paredes tenía una decoración con estuco
imitando grandes sillares de mármol.
Al igual que en la zona del Foro,
se han colocado en esta zona más estaturas de bronce.
7.- Templo de Apolo:
Frente a la basílica se encuentra
el templo de Apolo, dentro de una amplia zona delimitada por un cuadripórtico
con 48 columnas. La cella está situada en un podium típicamente itálico rodeado
por una columnata corintia con seis columnas en su parte frontal. A los pies de
la escalinata se encuentra un ara fabricada en mármol travertino, cuya
inscripción se remonta a la época de Sila, cuando Pompeya pasó directamente al
dominio de Roma. A la izquierda, según se mira la cella, se halla una columna
jónica en mármol gris y por encima de esta hay un reloj de sol.
El culto al dios Apolo, importado
de Grecia, estaba muy difundido en la región de Campania. Este templo se
remonta al siglo VI a. C. si bien su aspecto actual se debe a una remodelación
del siglo II a. C. y una restauración posterior al terremoto del 62 d. C. que
en el momento de la erupción aún no se había terminado.
Se supone que además de Apolo,
otras divinidades como Diana cazadora y Mercurio eran veneradas en este
recinto.
8.- Templo de los Lares:
Al lado del macellum se
encontraba una gran construcción de la misma época, identificada como el templo
de los Lares Públicos, es decir, de las divinidades tutelares de la ciudad, a
las cuales había sido dedicado después del terremoto del 62 y que había
aterrorizado a los pompeyanos.
9.- Templo de Vespasiano:
Inmediatamente después del templo
de los Lares se encontraba el templo de Vespasiano, con un altar de mármol
esculpido que representa la escena de un sacrificio.
Otros templos y lugares de culto:
1.- Foro triangular:
Se trata de una antigua área
sagrada de forma triangular, situada en una pequeña colina desde la que se hay
una vista panorámica de la costa. Se accede a la plaza por el vértice norte del
triángulo mediante un elegante pórtico precedido por seis columnas jónicas.
En la parte anterior del pórtico
se encuentra la base sobre la que se colocaba una estatua honoraria de M.
Claudio Marcelo, nieto de Augusto. El edificio que determinó la creación de
esta área sagrada es un templo muy antiguo, del siglo VI a. C. Originalmente
dedicado a Hércules, considerado por los habitantes de Pompeya como el fundador
de su ciudad. Más tarde se dedicó al culto de Minerva.
2.- Templo de Isis:
Levantado a finales del siglo II
a.c. y destruido casi por completo por el terremoto del año 62 d.c., fue
rápidamente reconstruido. Está integrado en la parte central de un
cuadripórtico con columnas estucadas y decoradas con pinturas, el templo se
eleva sobre un alto podium según el esquema del templo itálico con una
escalinata lateral. Al lado de la cella existen dos hornacinas destinadas a dos
estatuas de Anubis y Harpócrates.
En la parte trasera del templo se
levantan pequeños edificios entre los que figura la sala destinada a las
reuniones isíacas o Ecclesasterion; junto al ara se encuentra el Purgatorium
con un hueco subterráneo que conservaba agua del Nilo utilizada en las
ceremonias de purificación.
3.- Templo de Venus:
El templo de Venus se encontraba
al sudoeste del foro y disfrutaba de vistas al mar. En el momento de la
erupción el edificio estaba en obras.
Termas:
Las termas eran recintos públicos
destinados a baños. Tenían estancias
separadas para hombre y mujeres.
Las termas públicas romanas
respondían a una función social y política. Eran el lugar ideal para la
conversación relajada, el recreo y la relación social, con todo lo que ello
significaba. Se cuidaba el ambiente con una delicada decoración en donde no se
escatimaban medios, llenando las estancias con frescos, mosaicos y estatuas.
En Pompeya hay varias termas:
1.- Termas Estabianas:
Las termas Estabianas se
encuentran en el cruce de la Vía Estabiana (Via Stabiana) y la de la Abundancia
(Via dell'Abbondanza) y son las más antiguas de la ciudad, del siglo IV a. C.
Muestran signos de sucesivas restauraciones, la última de ellas tuvo lugar
después del terremoto del año 62. Tenía una sección masculina y otra femenina y
un sofisticado sistema de calefacción: el aire caliente circulaba bajo el piso
y entre las paredes.
Tanto la sección masculina como
la femenina estaba compuesta por una sala de vestir (apodyterium), una sala con
piscina de agua fría (frigidarium), de una sala templada (tepidarium) y de una
sala muy calefaccionada (calidarium), dotada de una bañera para agua caliente y
de una fuente para abluciones con agua tibia. Además había otras salas, algunos
anexos al gimnasio y una gran piscina para nadar al aire libre.
En la palestra de las termas
existía un reloj de sol que tenía más de 200 años en el momento de la erupción,
y conservaba una inscripción en osco que recordaba que lo había pagado el
ayuntamiento con el dinero obtenido de las multas.
2.- Termas del foro:
Las termas del foro, si bien no
son las más grandes de la ciudad, tienen gran interés debido a su elegante
decoración y el excelente estado de conservación del calidarium y del
tepidarium de la sección masculina.
Dos corredores permiten, en el
caso de las termas para hombres, el paso al apodypterium de donde se pasa al
frigidarium, en cuyo centro se encuentra una bañera circular para los baños
fríos; y al tepidarium, decorada con fino estuco de la mitad del siglo I a. C.
donde se conserva un gran brasero que servía para calentar el ambiente. Del
tepidarium se accede directamente la sala para baños cálidos, el calidarium
calefaccionado con aire caliente que pasaba por el interior de las paredes
dobles.
Esta habitación está dotada de
dos bañeras: el alveus, de forma rectangular, para los baños calientes, y el
labrum, con agua fría.
3.- Termas centrales:
Las termas centrales fueron
ampliadas después del terremoto del 62 y para el 79 aún no estaban
completamente terminadas. Eran exclusivas para hombres, carecían de
frigidarium, pero tenían un servicio del que carecían las otras termas: el
laconicum, un ambiente para baños de vapor con aire caliente y seco. Este
complejo, por la luminosidad y amplitud de las salas, su gran gimnasio y la
excelente calidad del material de construcción, no tenía nada que envidiar a
las termas de las grandes ciudades, incluida Roma.
4.- Termas suburbanas:
Están situadas en los extramuros
de la ciudad, cerca de la Puerta Marina. Fueron construidas a comienzos del
siglo I d. C. y estaban en proceso de restauración en el momento de la
erupción. Se trataba de un establecimiento privado.
Sus dimensiones eran muy
inferiores a las de las termas públicas del centro de la ciudad y no hay
indicios de que tuvieran una sección destinada a las mujeres; su principal
atractivo en cualquier caso, debía de residir en las maravillosas vistas que
tenía al mar, de las cuales podían disfrutar los clientes desde un espacioso
solárium.
Lo que las ha hecho famosas son
las ocho escenas de actividades sexuales de la parte superior de la pared del
vestuario (apodyterium), de las cuales se han conservado únicamente las
pinturas de una de las paredes, pero originalmente debían estar también
decoradas las otras dos, presentando tal vez veinticuatro variedades distintas
de posturas para practicar el sexo. Debajo de las escenas encontramos otras
pinturas que representan unas cajas o cestas de madera, todas ellas debidamente
numeradas (todavía pueden leerse los números I-XVI).
Estos vestuarios no disponían de
nichos empotrados para guardar la ropa, aún son visibles las huellas de un
estante que recorría toda la habitación por debajo de las pinturas, y en el
cual habría habido unas cajas o cestas individuales.
Instalaciones deportivas y de
ocio:
1.- Palestra o Gimnasio:
La palestra era la escuela de
lucha en la Grecia Antigua. Funcionaba independientemente o como una parte de
los gimnasios públicos. Una palestra podía existir sin pertenecer a un
gimnasio, pero ningún gimnasio podía existir sin tener una palestra.
Los eventos que no requerían
mucho espacio, tal como la lucha y el boxeo, se hacían directamente en las
palestras.
En Pompeya hay dos:
Palestra Samnita.-Recibe el nombre de Samnita porque se remonta a la época en la que Pompeya estaba habitada por el pueblo Samnita (Siglo II a.C)
Siguiendo el modelo griego, el
gimnasio fue utilizado para la formación de hombre y niños. Tenía una puerta
que conectaba el gimnasio con el foro triangular donde había una pista para
correr.
Palestra Grande - Gimnasio
Grande.-La palestra Grande es un extenso
edificio rectangular, de 141 x 107 m, situado al lado del anfiteatro. Estaba
dedicado a las actividades gimnásticas y se construyó en época imperial.
En el centro hay una piscina
(natatio) de 34,55 x 22,25 m, con el fondo en pendiente (desde un metro a 2,60)
a fin de ofrecer a los nadadores la posibilidad de disfrutar de diversas
profundidades de agua.
2.- Edificios para espectáculos:
- Teatro Grande.-Adyacente al Foro triangular se
encuentra el teatro grande. Es de la primera mitad del siglo II a. C.,
construido a la manera del mundo griego helenístico, aprovechando la pendiente
natural de una colina y restaurado y ampliado notablemente en la época romana.
El espacio reservado a los
espectadores estaba dividido en tres niveles de gradas de mármol. El escenario
tenía las tres puertas clásicas. También disponía de una cubierta “velarium”
para los días más calurosos.
En el teatro se representaban
comedias y tragedias de tradición greco-romana.
- Cuadripórtico de los Teatros
o Cuartel de Glaiadores.-Esta área se encuentra detrás del
Teatro Grande. Está rodeada de un pórtico dórico, en el que se encontró una
copia del Doríforo de Policleto en buen estado de conservación.
Esta zona se usaba inicialmente
como área donde los espectadores podían pasear y descansar en los intervalos de
los espectáculos teatrales.
Tas el terremoto del 62 d.C
cambia su uso, pasa a ser el cuartel para los gladiadores lo que obligó a
reorganizar el edificio.
En este espacio hay de nuevo
esculturas de bronce.
- Teatro Pequeño.-El teatro Pequeño u Odeion fue
construido a principios del período romano (80 a. C.) junto al Teatro grande.
Tenía un tejado estable, fundamental para la acústica de la construcción; la
presencia de este elemento, junto con los demás caracteres constructivos, ha
llevado a la identificación del edificio como un odeón, destinado a
representaciones musicales, mímicas y recitado de poesía.
- Anfiteatro.-Se encuentra al final de la Vía
de la Abundancia y constituye el ejemplo más antiguo conocido hasta ahora de
anfiteatro de piedra; en Roma, por ejemplo, el primer anfiteatro fue el de
Estatilio Tauro, de 29 a. C.
El anfiteatro de Pompeya, a
diferencia de las construcciones similares de época imperial, no tenía galerías
bajo del coso, que está mucho más bajo que el nivel de la plaza.
La cávea se divide en tres series
de graderías, la última de las cuales se reservaba a las mujeres. En la parte
superior del anfiteatro aún son visibles los agujeros destinados a alojar las
sujeciones del velario, el toldo gigante que se extendía para proteger a los
espectadores del sol y la lluvia.
Podía alojar hasta 20.000
espectadores que no solo eran de Pompeya, algunos venían de las ciudades
cercanas.
Se encuentra en uno de los
extremos de la ciudad para facilitar la entrada y salida de los espectadores.
En el año 59 d.C se produzco una
reyerta entre pompeyanos y habitantes de Nocera. Tras ese suceso, el Senado de
Roma decidió cerrarlo. Volvió a ser abierto 10 años después tras el terremoto
del 62 d.C.
El anfiteatro fue escenario de un
concierto del grupo de rock Pink Floyd en 1971.
Hoy, en medio del antiteatro hay
una estructura que aloja un pequeño museo donde se pueden ver objetos
encontrados en las excavaciones.
Edificios económicos:
1.- El Lupanar:
De lupa que en latín significa
loba que es como se conocía a las prostitutas, el Lupanar era el más importante
de los numerosos burdeles que se encontraron en Pompeya, y el único construido
con esta precisa finalidad.
Las prostitutas eran esclavas
griegas u orientales, su precio iba de dos a ocho ases (el vaso de vino costaba
uno), pero la recaudación era del patrón o del dueño del burdel.
El lupanar era un pequeño
edificio situado en el cruce de dos calles secundarias, estaba constituido por
una planta a nivel del suelo y un primer piso. La planta baja estaba destinada
al acceso de esclavos o de las clases más pobres; tenía un corredor y cinco
habitaciones con cama, las paredes estaban cubiertas de pinturas que expresaban
distintas posiciones eróticas.
Al piso superior se accedía por
una entrada independiente que daba a una escalera y luego a un balcón. A ese
balcón daban las distintas habitaciones, eran más grandes y decoradas que las
de la planta baja y estaban destinadas a una clientela más acomodada.
La construcción es del último
período de la ciudad. Las paredes se encuentran cubiertas de motivos eróticos.
2- El Thermopolium o Termopolio:
Un Thermopolium o Termopolio era
un establecimiento comercial en el que podían comprarse alimentos listos para
comer. Se considera el antepasado de los restaurantes actuales, comparándose a
veces los alimentos que servían con la comida rápida moderna. Estos locales
servían principalmente a pobres o a quienes no podían permitirse una cocina
privada, lo que a veces hacía que fueran desdeñados por los de clases más
altas.
Un termopolio típico consistía en
una pequeña habitación con un peculiar mostrador de albañilería. Empotrados en
él había jarras de barro (llamadas dolia) en las que se almacenaba la comida
caliente. Algunos estaban decorados con frescos.
En Pompeya había varios, el que
visito es:
- Thermopolium del Vetutius
Placidus.- En este recinto hay que destacar el “quiosco”, que es el muro del
fondo muy bien conservado que constituye un “larario” dedicado a:
a.- Lo Lares - los dioses
protectores de la casa.
b.- El “genius” protector del dueño.
c.- Mercurio - El dios del
comercio.
d.- Dionisio – El dios del Vino.
En una de las grandes vasijas de
barro del mostrador se encontró un pequeño tesoro de casi tres kilos de
monedas. Probablemente las últimas ganancias del mesonero, que confirman lo
rentable de esta actividad.
3.- Molino con horno:
El hallazgo de un molino con
horno testimonia el carácter, todavía doméstico y primitivo, que en la
antigüedad tenía la industria del pan. Las piedras de molino estaban formadas
por dos bloques de lava volcánica y sustentada por unos cimientos. La piedra
inferior actuaba de eje de rotación fijo, y a la superior se le hacía girar a
fuerza de brazos o mediante asnos, con una armadura de madera y dos barras que
sobresalían. Se hacía caer el trigo entre las dos superficies de contacto, la
harina se recogía en el borde de la base circular.
Junto a las muelas se pueden ver
todavía, bien conservados, los bancos para amasar el pan, el horno para cocerlo
y el lugar para venderlo.
Necrópolis:
Una necrópolis es un cementerio o
lugar destinado a enterramientos. Etimológicamente significa ciudad de los
muertos/cadáveres, pues proviene del idioma griego: necro = muerto o cadáver, y
polis = ciudad.
El término se emplea normalmente
para designar cementerios pertenecientes a grandes urbes, así como para las
zonas de enterramiento que se han encontrado cerca de ciudades de antiguas
civilizaciones.
En Pompeya había varias
necrópolis, todas cerca de las murallas y de las puertas de la ciudad. Algunas
de ellas son:
1.- Necrópolis de la Puerta de
Herculano:
Esta necrópolis está a lo largo
de la calzada que conduce a Nápoles.
Hay dos tumbas con un asiento
semicircular características de Pompeya y que eran construidas por la asamblea
de la ciudad para sus ciudadanos ilustres.
2.- Necrópolis de la Puerta
Vesubio:
Esta zona no se puede visitar, al
menos cuando yo he estado y eso que debe ser muy interesante ya que se han
encontrado varias tumbas entre las que destaca la del magistrado Caius
Vestorius Priscus (75 d.C) que se ajusta a la arquitectura de la época imperial
con paredes ricamente decoradas con frescos.
3.- Necrópolis de la Puerta Nola:
En esta zona se han encontrado
solo 4 tumbas monumentales. En esta zona se encontraron 15 víctimas de la
erupción de las que se sacaron moldes de yeso.
4.- Necrópolis de la Puerta
Nocera:
Se ha construido a lo largo de la
calzada que va paralela a la muralla. Hay tumbas representativas de los modelos
arquitectónicos de principio del Siglo I a.C.
Residencias privada:
En Pompeya había diferentes tipos
de casas que diferían mucho en su diseño.
Las casas sencillas tenía una
sola puerta a la calle, estaban cerradas por altas paredes sin ventanas y
provistas sólo de altos y estrechos respiraderos hacia el exterior, que servían
para la ventilación. Eran como pequeñas fortalezas.
Desde la entrada, tras haber
recorrido un estrecho corredor, se llegaba al patio central o atrio; alrededor
del cual se encontraban las habitaciones de alojamiento, los “cubicula”, y
frente a la puerta estaba el “tablinum”, lugar de reunión de toda la familia.
Este tipo sencillo y austero de
casa pompeyana, usado en los siglos IV y III a. C., poco a poco se transformó,
gracias a la influencia griega, en una casa más suntuosa casi un palacio.
Las casas lujosas del rico
patricio o del mercader enriquecido tenían siempre una modesta habitación que
alquilaban a los pequeños artesanos o comerciantes.
Estas habitaciones eran para una
sola familia, porque en Pompeya todavía no se habían construido las casas de
alquiler tan características de Ostia Anticua y que eran muy corrientes en
otras zonas de la Roma imperial.
Algunas de las casas que se
pueden visitar en Pompeya son:
1.- Casa del Fauno:
La Casa del Fauno es una de las
construcciones más lujosas de la ciudad. La entrada principal da a la Vía de la
Fortuna y ocupa toda una manzana de la Región VI. La casa tiene sus orígenes en
la época samnítica, cuando era amplia pero modesta. A fines del siglo II a. C.
pasa a ocupar una manzana entera y recibe una suntuosa decoración a base de
estuco y mosaicos, que se restauraron y conservaron sin apenas modificaciones
durante los 200 años siguientes, manteniendo un estilo que debía de parecer muy
anticuado a los habitantes del año 79.
En la parte anterior de la
entrada se encuentra el saludo HAVE (forma del latín vulgar para «ave»,
bienvenido). El ingreso está provisto de puerta doble y en el vestíbulo se
encuentran dos atrios, uno de ellos, el principal, contiene una pequeña fuente
con una pequeña estatua de un fauno danzante que ha dado el nombre a la casa.
(El original se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles).
Se supone que a principios del
siglo I a.c. fue la morada de P. Sila, sobrino del dictador Sila, quien tuvo la
misión de organizar la colonia romana y de conciliar los intereses de los
colonos con los de los antiguos habitantes. En el pavimento de una de las
principales salas de recepción se encontró el mosaico antiguo más complejo que
se ha descubierto, el llamado Mosaico de Alejandro, que representa la batalla
de Issos, entre Alejandro Magno y Darío III Codomano. Está compuesto por entre
1.500.000 y 5.000.000 de teselas.
2.- Casa del Poeta Trágico:
La Casa del Poeta Trágico debe su
nombre a un mosaico que representaba a un instructor de actores de teatro (hoy
en el Museo Antropológico Nacional de Nápoles), y su fama a una serie de
frescos de temas heroicos y míticos.
Se trata de una casa de modestas
dimensiones pero decorada con mucha elegancia, probablemente una muestra de una
clase media enriquecida durante los últimos años de la ciudad.
A los lados de la puerta se
encontraban dos mostradores (que indican que el dueño de la casa también se
dedicaba al comercio), y sobre el piso se encontraba la inscripción Cave Canem
(Cuidado con el perro) al lado de la imagen de un perro sujeto por una cadena.
3.- Casa de Amaranto:
La casa de Amaranto consiste en
dos viviendas unidas: una casa radicional con atrio y una taberna con un amplio
peristilo en la parte trasera. En ambas se encontraron montones de ánforas: 12
en el atrio de la casa y 11 en el jardín anexo a la taberna de la casa. Más de
30 de las ánforas encontradas eran de origen cretense. Estaban toda boca arriba
y se cree que todas eran parte de un cargamento llegado antes de la erupción.
Las casas estaban en un estado
deplorable cuando se produzco la erupción, el mostrador de la taberna estaba en
ruinas, el jardín abandonado... al parecer el conjunto de las dos casas era
entonces utilizado solo como almacén de tinajas de vino.
En las ruinas se encontró el
esqueleto de la mula que se usaban para trasportar las ánforas y a sus pies un
perro. Dos de las ánforas llevaban el nombre “Sexto Pompeyo Amaranto” o
simplemente “Sexto Pompeyo”. El nombre de Amaranto aparece también en un par de
grafitos hallados en otros lugares de la vecindad, así como en un anuncio en la
propia pared de la vivienda situada en la Vía de la Abundancia, donde un tal
“Amaranto Pompeyano” invita a sus conciudadanos a votar a su candidato
preferido.
4.- Villa de los Misterios:
La villa de los Misterios es uno
de los edificios suburbanos de Pompeya, situado a unos doscientos metros de la
Puerta de Herculano, fuera de los límites de la ciudad. Se trata de una
construcción que presenta una disposición armoniosa y singular de sus ambientes
y una superlativa colección pictórica. Fue construida en la primera mitad del
siglo II a. C. y fue muchas veces remodelada y ampliada. Se presenta como una
construcción de cuatro lados circundada por una terraza panorámica. Después del
terremoto del año 62 la Villa cambió de propietarios y de usos: de vivienda
señorial pasó a establecimiento agrícola.
Esta casa es un ejemplo de
vivienda de gran lujo unida a una explotación agrícola ganadera. Está integrada
con el paisaje mediante grandes pórticos y galerías que dan a jardines
colgantes. La Villa de los Misterios es muy diferente del resto de las casas de
la ciudad.
Casi todas sus paredes están
decoradas con pinturas, destaca una serie de grandes frescos que se supone que
representaban la iniciación de las esposas a los Misterios Dionisíacos. En la
llamada Sala de la Gran Pintura, hay una serie de frescos que datan del siglo I
a. C., que representan los diferentes pasos de un ritual que Roma intentó
eliminar sin mucho éxito.
Las imágenes son muy elocuentes:
un niño leyendo el ritual bajo la supervisión de una matrona, una joven que
lleva una bandeja con ofrendas, un grupo de señoras en una celebración
sacramental, un sileno que toca una lira mientras una jovencita ofrece su seno
a una cabra, otro viejo sileno ofrece una bebida a un pequeño sátiro mientras
otro más joven le alcanza una máscara teatral, entre muchas otras. También se
representan las bodas de Dioniso y Ariadna.
5.- Casa de la Columna Etrusca:
Es un edificio pequeño y modesto
situado en la Región VI. Debe su nombre a una columna de facción típicamente
etrusca que se halla empotrada entre dos salas de la casa, y que data del siglo
VI a. C. La columna formó parte de un santuario al aire libre, debajo de ella
se ha encontrado cerámica griega (correspondiente a ofrendas) y restos de un
bosquecillo de hayas, como corresponde a los santuarios de esa época. En el
siglo III a. C., debido al crecimiento de la ciudad, la casa se edificó
alrededor de la columna conservándola y dejándola visible, probablemente por
respeto a su antiguo significado religioso.
6.- Casa de Octavio Quartio:
Es una versión en miniatura de
las grandes villas aristocráticas tan comunes en el campo. Era el tipo de casas
usada por la élite antes de la erupción.
Conserva la planta original con
un atrio de tipo tradicional. El jardín está a dos niveles y con dos flujos de
agua “euripos” perpendiculares con cascadas.
En esta casa destacan las
referencias a Egipto y a la diosa Isis que hay en la decoración y en el jardín.
Tiene una hornacina con frescos de motivos mitológicos.
En las habitaciones hay también
frescos bien conservados.
7.- Casa Casca Longus:
También conocida como la casa de
los Quadretti Teatrali. Es la unión de dos casas del S II a.C que hacen de
atrio principal y secundario.
Es estanque “inplivio”, donde se
recogía el agua de la lluvia para tener en casa agua, está recubierto de mármol
rojo.
Al lado hay tres patas con forma
de león que sujetaban una tabla. Tienen gravado el nombre de su propietario
“Publius Servilius Casca Longus” que fue uno de los conspiradores para matar a
Cesar en el 44 a.C. El propietario de esta casa era un anticuario y se
hizo esta preciada pieza.
Otra imagen de la casa.
8.- Casa de Giulio Polibio
Es uno de los raros ejemplos de
la vivienda de la época medio-Samnita (Silo III-II a.C) con un diseño muy
diferente al resto de las casas de Pompeya.
En esta casa no se puede entrar,
está en reconstrucción y ahora están con su fachada.
9.- Casa del Ara Máxim:
Es una casa peculiar, su rareza
es que no tiene jardín. En la casa se encontró una mesa poco peculiar, tenía
una esfinge como base, hoy está expuesta en el museo arqueológico de Nápoles.
También se encontraron muchos objetos de bronce entre los que destacan 120
anzuelos.
Los frescos de sus paredes están
muy bien conservados.
10.- Casa de la Venus de la
Concha:
Es una casa del Sigo I a.C con un
jardín que es el centro alrededor del cual se abren las habitaciones con
bonitos frescos.
A destacar la pared del fondo del
peristilo decorada con un gran fresco de Venus saliendo de la concha que da el
nombre a la casa.
11- Casa del Efebo:
Es la típica casa de los
comerciantes que se enriquecieron a finales del Siglo I d.C gracias al tráfico
comercial que proliferó en la zona.
La parte más suntuosa es la zona
del jardín con un triclineo decorado con rosetas y flores de loto, es único en
Pompeya.
En el jardín hay un pequeño
“sacellum”, un recinto sagrado dedicado al culto doméstico y decorado con una
gran pintura de Marte y Venus.
Se encontró una estatua de bronce
de un efebo, que da el nombre a la casa y que hoy se expone en el museo
antropológico de Nápoles.
Hay unos pequeños y bonitos
detalles pintados en el estuco de las paredes.
Otros detalles de la casa:
12.- Casa de los Amorcillos
Dorados:
Es una de las más elegantes de la
época imperial. La casa gira alrededor de un bonito peristilo con jardín en el
que destacan las columnas a diferentes niveles coronadas por un frontón.
Tiene un gran salón para recibir
en el que destacan los frescos con motivos mitológicos y su suelo de mosaico
con rosetón central que estaba de moda en la época de Augusto.
En el patio hay sitio para el
culto, tiene dos pequeños altares para honrar a varias deidades egipcias.
13.- Casa de los Huertos de
Frutas:
Es una casa de una única planta
con atrio y un pequeño espacio verde en su parte trasera.
Lo peculiar de esta casa es que
las salas para recibir tienen frescos que representa un jardín con plantas
ornamentales y frutales. Lo habitual es que este tipo de motivos se usaran para
los recintos privados dedicados al descanso de la familia.
En esta casa hay un grupo de
arqueólogos trabajando en los mosaicos.
14.- Casa de Paquius Proculus:
La primera planta de esta casa es
de la época Samnita (Siglo II a.C). Es
conocida es por sus mosaicos perfectamente conservados que representan un perro
con cadena agazapado delante de una puerta, esto en Pompeya representaba la
custodia de la casa.
El atrio está cubierto por un
maravilloso mosaico a cuadros con animales policromos que aluden a la
prosperidad y dos retratos uno de una mujer y otro de un hombre.
Otras imágenes de la casa.
Huertos y zonas de cultivo:
En Pompeya también se cultivaba,
tanto para el consumo interno de la ciudad como para exportar, dentro del
recinto arqueológico se han encontrado muchos espacios dedicados al cultivo.
Algunos de ellos son:
1.- Praedia de Lulia Felix:
Era un gran complejo organizado
como una villa urbana de finales del Siglo I a.C propiedad de Lulia Felix.
Tiene cuatro zonas diferentes con
entradas independientes: una casa con atrio, un jardín que da a una serie de
ambientes residenciales, una instalación termal y un amplio parque.
El nombre de Lilia Felix aparece
en una inscripción pintada en la fachada en el que la dueña anuncia la cesión
de parte de su propiedad. Esta inscripción se encuentra en el museo
Arqueológico Nacional de Nápoles.
En esta casa también hay obras,
se están reparando los mosaicos que bordean el jardín interior.
2.- Viñedos:
Pompeya tenía su propia
producción de vino y en sus huertos se cultivaban las uvas. En las excavaciones
se han encontrado material orgánico que ha resistido a la erupción y al paso
del tiempo y hoy se está empezando a cultivar el mismo tipo de vid para preparar
el vino que se tomaba en la ciudad antes de la erupción.
Por toda la ciudad se pueden ver
huertos
Construcciones defensivas:
1.- Puerta Marina:
Hoy es la puerta principal de
acceso a las excavaciones, se trata de un bastión alzado al borde del altiplano
construido con “Opus caementicium” (el hormigón que usaban los romanos) y que
es una mezcla de mortero y piedras.
Recibe este nombre porque era la
puerta que daba al mar. En la antigüedad se conocía como Puerta de Neptuno o del
Foro. Está formada por dos aberturas cubiertas por una bóveda de piedra. Una de
ellas era para los peatones, la otra, algo más ancha, permitía el paso de
carros y cabalgaduras. No era, originalmente, una entrada importante debido a
la fuerte inclinación de la calle que al principio la hacía inaccesible para el
tránsito de carruajes.
2.- Puerta Herculano:
Esta puerta fue construida tras
la conquista de la ciudad por parte del general romano Silla en el 89 a.C. A
diferencia de las otras, carece de defensas porque se construye en un momento
en el que ya no tenía mucho sentido tener muralla.
Debe su nombre a que de aquí
arrancba el camino que unía Pompeya y Herculano.
3.- Puerta Nocera:
Es la puerta que daba acceso a la
ciudad desde el camino que llevaba a la Nocera, pertenece a la época Sumnita
(Siglo IV a.C) aunque ha sufrido varias restauraciones posteriores.
La puerta presenta analogías
arquitectónicas con la Puerta Nola y la Puerta Estabia. Está construida con
sillares de piedra caliza y parece más alta debido a la altura de la calzada en
ese punto.
4.- Puerta Nola:
Debe su nombre a que daba acceso
a la calzada romana que llevaba a Nola. Tenía una inscripción en su parte
superior que se conserva en el British Museum que indica el nombre de su
constructor y que es de la época Samnita (Siglo III a.C).
Está construida con sillares de
toba superpuestos y con bóveda de cañón mezclando así piedra y mortero.
5.- Puerta Vesubio:
Otras construcciones:
1.- Comitium y Edificios
Municipales:
El Comitium está situado en la
esquina sudeste de la plaza del Foro. Fue construido durante el Siglo II a.C y
originalmente era la sede de la mesa electoral, más tarde pasó a ser el lugar
donde re recontaban los votos y donde sea anunciaba a los nuevos jueces
elegidos.
La importancia que este edificio
tenía para la vida política se puede ver en los carteles electorales que
cubrían sus pilares.
Al lado hay tres edificios de la
administración pública que dan a un pórtico que los conecta al Comitium y a la
basílica:
- El Tabularium.- Es un archivo con
espacio que aislaba los documentos para evitar que llegara un fuego desde el
exterior.
- La Curia.- Es la sede local del
senado.
- El edificio de los Douviri.- Los
Douviri eran los magistrados que gobernaban la ciudad.
2.- Calles y Calzadas:
Es increíble el estado de
conservación de las calles y las calzadas. Siguen el modelo de construcción
típico de roma.
Otras imágenes de Pompeya:
Llegan las 5, que es la hora de
cierre del recinto en su horario de invierno, no hemos parado de andar pero se
me ha pasado el tiempo volando. Hay muchas cosas que ver y es necesario
dedicarles tiempo.
Para salir no podemos usar la
Puerta Marina, está cerrada y hay que salir por un lateral donde podemos ver
nuevas estatuas de bronce que siguen la misma línea de las que hemos visto en
otras zonas del recito.
Damos por finalizada la visita a
Pompeya, me ha gustado mucho ahora solo falta esperar al tren para volver a
Nápoles. Es el primer tren tras el cierre del recito y va a tope, así que
paciencia y aguantar hasta que llegamos a Nápoles.
Dejamos la mochila en el hotel y
salimos a pasear para encontrar algún sitio donde cenar antes de volver a
dormir.